El campo holandés Kennemer ha provocado una importante escabechina entre los jugadores del KLM Open, pero se ha cebado con especial crueldad con los españoles. De los once que empezaron el jueves, sólo dos han conseguido sobrevivir al corte: Alejandro Cañizares, el mejor con (-4) y Luis Claverie (-3). El recorrido se está mostrando mucho más exigente de lo que pueda parecer a simple vista por los resultados.
Es cierto que se deja hacer birdies, pero el número de bogeys y, sobre todo, de doble bogeys es realmente espectacular. Para que se hagan una idea, sólo en la segunda jornada, han sido prácticamente cien (96) los hoyos que se han concluido con doble bogey o peor. El campo, si se juega recto, no es especialmente complicado, pero en cuanto se pierde calle la penalización es segura. De hecho, el Kennemer es propicio para perder bolas.
El mejor parado en estas condiciones fue David Carter, golfista nacido en Sudáfrica, pero que juega bajo la bandera inglesa y que llevaba mucho tiempo sin hacer ruido. Ha vuelto a hacer 65 golpes en la segunda jornada y lidera con -10, dos golpes menos que sus tres perseguidores: el héroe local, Joost Luiten, el sueco Alex Noren y el y el neozelandés Steve Alker.
¿Y por qué ha recuperado las buenas sensaciones precisamente esta semana el bueno de David? Pues la respuesta tiene nombre y apellidos: se llama Leo Carter, tiene cuatro años y es el hijo del jugador inglés y su mujer Therese, la hermana del jugador profesional sueco, Fredrick Jacobson. Carter asegura que durante el pasado Open de Escandinavia lo siguieron durante tres rondas y eso le sirvió de inspiración. En cuanto a la expiración, la clave de su liderato está en lo bien que se ha manejado con el putter y, especialmente, su seguridad con el driver.
Alejandro Cañizares es la gran baza española en este KLM open. El joven jugador está a sólo un golpe del top ten y parece que tiene bien ajustado su juego en Holanda. Está haciendo muchos birdies y ha sumado dos rondas por debajo del par, algo de lo que no muchos jugadores pueden presumir en tierras holandesas. Luis Claverie está firmando, por su parte, su mejor actuación en el circuito Europeo en la presente temporada, argumento más que suficiente para que esté contento, aunque quedan dos días por delante y seguro que no piensa renunciar a nada. De hecho, sólo tiene un golpe más que Alejandro…
El corte se situó finalmente en el PAR, un resultado que tenía bajo el brazo Pablo Martín hasta que llegó el hoyo 9, el último de su recorrido. El malagueño se atascó, firmó un doloroso cuádruple bogey y se quedó fuera del fin de semana. Tampoco jugarán José Manuel Carriles, Juan Parrón y Carlos Rodiles (+1); Jesús María Arruti (+2); Rafa Cabrera y Pablo Martín (+4); Gonzalo Fernández-Castaño (+6) y Santi Luna (+7). Manuel Quirós, por su parte, abandonó el torneo cuando discurría por el decimosegundo hoyo de su recorrido.
Por cierto que Stefan Langer terminó con su calvario casi como lo empezó. Firmó 91 golpes, +21 y deja el torneo con un acumulado de +49. Su padre, Bernhard sí jugará el fin de semana, aunque su vuelta por encima del par lo ha relegado a posiciones algo más retrasadas que tras el primer día.