El LPGA Tour pone fin esta semana a su gira por la costa oeste. Se despide con el LPGA Mediheal Championship, en el recorrido Lake Merced, en San Francisco. Territorio Lydia Ko por los cuatro costados. Aquí ganó en 2014 su primer torneo en el circuito americano cuando aún era una adolescente. Volvió a ganar en 2015 y se impuso de nuevo el año pasado en un final de torneo apasionante que rompía con una sequía de casi dos años sin victorias.
Ko no sólo ha ganado tres veces en Lake Merced, además ha dejado su huella de por vida. Y es que este año se ha descubierto una placa en la calle del hoyo 18, justo desde el sitio donde pegó su extraordinaria madera 3 el año pasado. Fue el segundo golpe en el desempate ante Minjee Lee. La dejó a un metro para eagle y se llevó el triunfo. “Uno de los tres mejores golpes de mi vida”, asegura un año después la golfista de Nueva Zelanda. Curiosamente, Ko ha desvelado esta semana que ha roto con Ted Oh, el entrenador con el que volvió a ganar el año pasado. Ahora mismo está sin ‘coach’ fijo.
Pues bien, en el jardín de Lydia estarán buscando la victoria Carlota Ciganda, Azahara Muñoz y Beatriz Recari. Una vez más hemos estado muy cerca de tener a cuatro españolas, pero Luna Sobrón se quedó a sólo dos golpes de conseguir una plaza en la previa del lunes. Azahara jugará en uno de los partido estelares los dos primeros días, junto a Lexi Thompson y So Yeon Ryu.
Tanto Azahara como Carlota llegan al torneo en un buen momento de forma. La semana pasado no pudieron pelear por la victoria, pero lograron un valioso top 25 y se mantienen entre las diez mejores del ránking del LPGA. El año pasado Carlota fue undécima y Azahara terminó en el top 30. Además, terminaron dos veces en el puesto 15º en este mismo campo cuando el torneo se llamaba Swinging Skirts. Recari, sin embargo, tiene el recorrido atravesado, pues en tres presencia no ha logrado pasar aún el corte.
