Carlota Ciganda (-6) ha dado un giro de 180 grados a su posición en el LPGA Drive on Championship después de entregar una fabulosa tarjeta de 65 golpes en la segunda ronda del torneo. La navarra ha pasado de estar peleando por pasar el corte a meterse en la pelea por la victoria. Esto es darle la vuelta a la semana como a un calcetín.
La clave ha estado en el arranque de la jornada en el recorrido Great Waters de Georgia. Ha encadenado seis birdies entre los hoyos 2 y 7 y ha añadido uno más en los segundos nueve. Una vuelta inmaculada apoyada en un gran juego de tee a green y, sobre todo, en el putter. Carlota, que ayer estuvo trabajando por la tarde en el putting green, ha encontrado algo que le ha hecho estar más cómoda. «Hoy han entrado los putts que se venían resistiendo las últimas semanas. Es uno de esos días en los es muy divertido estar en el campo de golf», aseguraba tras firmar la tarjeta.
Carlota se ha colocado en la octava posición del torneo, a sólo cuatro golpes del liderato que ostenta en solitario la norteamericana Ally McDonald (-10). A un golpe de la jugadora Solheim está la sorprendente tailandesa Bianca Pagdanganan y Daniella Kang y a dos se ha situado Ariya Jutanugarn. Como ven, una zona alta de la clasificación de altos vuelos donde se ha colado Carlota.
También estará el fin de semana Azahara Muñoz (+3), aunque ha tenido que esperar hasta el último segundo para confirmarlo. Ha entrado en el puesto 70º. La angustia ha sido curiosa, ya que dos jugadoras del último partido del día han llegado al hoyo 18 con un resultado de +3. Un birdie de cualquiera de ellas habría sacado del corte a todas las que estaban en ese registro. Finalmente no lo han hecho y Azahara tendrá dos rondas más por delante para seguir remontado posiciones. Hoy se quitó pronto el mal sabor de boca del jueves después de no hacer ningún birdie. En el hoyo 2 ya había conseguido un eagle. A partir de ahí, su ronda ha sido muy irregular, aunque suficiente para pasar el corte, con un birdie salvador en el hoyo 16.
