El LPGA Tour realizó este sábado en la tercera ronda del Kia Classic un experimento que tiene muy poco de casual. Llevó a cabo una revolución en la preparación del Aviara Golf Club, escenario del torneo. Concretamente, le quitó unas 300 yardas respecto al jueves y el viernes. Adelantó el tee en dos pares 4 (hoyos 9 y 16) para que se pudieran alcanzar de uno y prácticamente colocó el resto de salidas en la parte más adelantada de sus tees. El balance de este audaz movimiento ha sido una media de 2,3 golpes más baja que el viernes y casi tres respecto al jueves.
Como decimos, esta medida novedosa del LPGA no tiene nada de aleatoria. Responde a una serie de voces que vienen pidiendo desde hace tiempo un giro en la preparación de los campos del LPGA para proporcionar más espectáculo y, de paso, ayudar para que se vean vueltas más bajas.
El objetivo, desde luego, se cumplió. La media de golpes ayer fue de 71,2, frente a los 74 del jueves y los 73,5 del viernes. Además, en los hoyos 9 y 16 se vieron hasta seis eagles, tres en cada uno de ellos. Hubo vueltas muy bajas, como el 64 de Madelene Sagstrom, que firmó once birdies, la segunda cifra más alta de la historia del circuito americano, sólo superada por los 13 que rubricó Annika Sorenstam cuando hizo 59 golpes. Sagstrom mejoró en tres golpes la vuelta más baja de la semana (Hyo Joo Kim hizo 67 el jueves).
Eso sí, por mucha revolución que haga el LPGA Tour, hay cosas que siempre permanecerán inmunes. Es el caso del putter de Inbee Park (-12). La golfista coreana, que no hizo birdie ni en el 9 ni en el 16 y que admitió que le sorprendió la preparación del campo, firmó 69 golpes y domina con mano de hierro el torneo en su primera semana de competición en 2021. Tiene cinco golpes de ventaja sobre Mi Jung Hur, Mel Reid y Minjee Lee. Va disparada a la conquista de su vigésimo primera victoria en el LPGA Tour.
Un triunfo este domingo de Inbee Park la colocaría como la cuarta jugadora de todos los tiempos del LPGA que supera la cifra de 17 millones de dólares en ganancias y, de paso, le serviría para sacarse una espina en este torneo. Lo ha jugado en once ocasiones y no lo ha ganado nunca, a pesar de que tiene tres segundos puestos y su peor resultado ha sido un 21º.
A Azahara Muñoz (-1) y Carlota Ciganda (+1) no les sentó demasiado bien la nueva preparación del LPGA. La malagueña entregó una tarjeta de 73 golpes, la más alta de la semana, y cedió un buen puñado de puestos. Es vigésimo octava, a cuatro golpes del top ten. Lo cierto es que su vuelta no iba nada mal. Llegó a ponerse con un acumulado de cuatro bajo par después del hoyo 10, pero un doble bogey y un bogey en el 11 y 12 la frenaron en seco. Carlota hizo 72 golpes. Un doble bogey en el hoyo 18 lastró mucho su vuelta.
