La sueca se impone en Tailandia y Azahara Muñoz vuelve a firmar un torneo sobresaliente
Anna Nordqvist ha vuelto a ganar y la noticia tiene su enjundia. La jugadora sueca se ha impuesto en el Honda LPGA Thailand rompiendo una sequía de más de cuatro años. Una sequía real, dura, con grietas, pero que tenía mucho de Expediente X.
Nordqvist, la niña prodigio que irrumpió en su año de novata en el circuito americano como un vendaval, logrando a la primera un major (LPGA Championship), con sólo 21 años, y volviendo a ganar ese mismo año la final del LPGA, se había quedado parada en seco. No ganaba un torneo oficial del circuito americano desde aquel año 2009 (sumó una victoria no oficial en el Mojo en 2010 y ganó la copa de Europa de naciones con Gustafson en 2010 y 2011). Y no es que haya desaparecido del mapa o haya estado lesionada o cualquier otro problema que puedan imaginarse, no, simplemente, y ahí está la grandeza del golf, no conseguía rematar la faena. “¿Se me habrá olvidado ganar?”, llegó a balbucear entre pesadillas.
Y su sequía parecía de ciencia ficción porque en todo este tiempo, en estos casi cuatro años y medio, Nordqvist ha acumulado nada menos que 25 top ten. Es decir, ha rondado muchas veces la victoria. Y no sólo eso, ha estado alrededor del top 20 del ránking mundial todo este tiempo.
Este año decidió cortar por lo sano. Cambió de entrenador y de palos y los réditos han llegado enseguida. Hoy ha ganado, pero no es una victoria más. Es un triunfo de peso, de galones, de los que impulsan hacia arriba. Ha vencido en un fabuloso mano a mano a Inbee Park, y eso que la Número Uno no lo puso nada fácil. Apretó hasta donde pudo, hasta donde le dejó Nordqvist. Llegó a ponerse a un golpe después de ocho hoyos, pero la respuesta de la sueca ha sido brutal, como antaño, como si de golpe y porrazo hubiera recuperado ese instinto asesino suyo tan particular y que sólo se le había vuelto a ver en la Solheim. Firmó cinco birdies entre el 10 y el 16 y sentenció el torneo. Birdies de todos los colores, embocando un par de putts de más de cinco metros y pegando tirazos extraordinarios en el 10 y en el 14. Park se quedó sin respuesta. Poco más se le podía pedir. La surcoreana hizo 66 golpes sin bogeys para terminar segunda en solitario a dos golpes. Gran defensa del título y buena declaración de intenciones para todas aquellas que desean arrebatarle el trono. Resultados finales.
En cuanto a las españolas, gran actuación una semana más de Azahara Muñoz (-7), undécima. Acaba por segunda semana consecutiva a un golpe del top ten, muy arriba, con una gran vuelta final de 68 golpes. No obstante, más allá del resultado, lo mejor son las sensaciones. Está jugando de libro. Hoy, por ejemplo, no ha fallado una calle, y en toda la semana sólo se dejó por el camino cinco. Anda fina y a poco que cuadre la semana estará el domingo peleando por la victoria. Carlota Ciganda (+9) y Beatriz Recari (+11) cierran una semana difícil, aunque lógica en pleno rodaje de la temporada.
