El LPGA KEB Hanabank se decidirá en la última jornada con diecisiete jugadoras en dos golpes
El viento coreano de Incheon ha desatado una locura de torneo. Pocas veces durante la temporada se ven situaciones tan apretadas como la de esta semana en el LPGA KEB Hanabank Championship.
Terminada la tercera jornada tenemos a dos líderes, ambas coreanas, ambas con -5, Kyu Jung Baek y Hee Kyung Bae. A un golpe de ambas se han situado la friolera de diez jugadoras, entre las que destacan Inbee Park, decidida a celebrar su reciente boda regalándose el Número Uno del mundo, Pornanong Pathlum, Suzann Pettersen, Brittany Lincicome y la española Beatriz Recari. A dos golpes cabalga otro nutrido grupo de cinco jugadores entre las que está Azahara Muñoz. Conlcusión, en apenas dos golpes, una insignificancia en golf, y mucho más en las condiciones de viento que hay en Corea, hay diecisiete jugadoras. Y un dato más, en cinco golpes, vara que sirve para medir quién podría llegar a tener opciones de victoria en una ronda final, tenemos a más de treinta jugadoras, es decir, casi la mitad del torneo.
El torneo de Corea se ha convertido en una prueba de supervivencia y un disparate. Nadie se atreve a apuntar a una ganadora. Será un domingo de eliminación. Sólo la más fuerte se llevará el triunfo. La presencia de Park intimida, cómo no, aunque hay que destacar que las dos únicas que han jugado bajo par los tres días son Sandra Gal y Suzann Pettersen. Hay que tener muy en cuenta también a Recari, que nunca ha perdido el duelo con el campo. Hoy firmó 72 golpes, el par, con una dura batalla, cuatro birdies y cuatro bogeys.
Azahara también emerge con fuerza. El top ten mundial le espera y ya ha demostrado que puede bajar de 70 golpes sople como sople el viento en el Ocean course del Sky 72 Golf Club. Hoy firmó también el par del campo, con dos birdies y dos bogeys. Jugó como los ángeles de tee a green y sólo le faltó un poquito más de acierto con el putter para situarse arriba del todo. Si mañana está inspirada, apunten su nombre.
