Ocurrió el domingo 21 de julio de 2013, el mismo día que Phil Mickelson conquistaba Muirfield y alzaba su primera ansiada Jarra de Clarete. Ese mismo día, a muchos kilómetros de distancia de Gullane, Beatriz Recari se imponía en el Marathon Classic. Era su tercera victoria en el LPGA. Un récord extraordinario que muchos pensaban que nunca veríamos en España. No en vano, tres años antes todo el golf femenino español sumaba únicamente un triunfo en el circuito americano, en el Marta Figueras Dotti en 1994. Aquel domingo, una sola golfista, una navarra, se ponía ya con tres.
Fue una victoria, además, muy especial. En cierto modo, tenía su relación con lo que estaba ocurriendo en Escocia en el British, aunque al revés. Recari se jugó el triunfo mano a mano con la que posiblemente es el alter ego de Mickelson en el LPGA: Paula Creamer. La ‘Pantera Rosa’, como se le conoce en el circuito, es una de las golfistas más populares de su circuito, aunque su palmarés no se acerca lo más mínimo a lo que ha conseguido Mickelson.
Beatriz venció con un resultado acumulado de -17, con cuatro rondas por debajo de 70 golpes en el Highland Meadows Golf Club de Ohio. De nuevo ofreció una lección magistral de autocontrol, firmando únicamente dos bogeys en 72 hoyos, impresionante, y convirtiéndose en la primera europea que ganaba el torneo desde la gran Annika Sorenstam en el año 2000.
Así lo contamos en Ten Golf en 2013: