Jordi García del Moral hizo un pacto consigo mismo este invierno. Después de un año en el que pasó más tiempo metido en aulas y entre libros que el campo de prácticas, el golfista castellonense decidió darse una última oportunidad. Fue un compromiso, una apuesta, un todo o nada.
Esta particular partida de póker que está librando Jordi con el golf podrá salir mejor o peor, pero hay una cosa que está clara: no va de farol. García del Moral se ha sentado a la mesa con muy buenas cartas. Se va a dar una última oportunidad con todas las de la ley. «He empezado a entrenar la parte física con el mismo equipo de trabajo que tienen Alejandro Cañizares o Mario Galiano, en Almenara, y estoy muy contento. Además, me he vuelto a poner a las órdenes de José Carlos Gutiérrez y hemos hecho un pequeño cambio con el que me siento mucho más cómodo», asegura.
Los frutos de esta preparación se han visto bien pronto. Pese a que no entrenó demasiado en 2015, ya que estuvo sacando un curso en gestión de campos, tras el que colaboró con Valderrama, no ha tardado nada en ganar en 2016. Concretamente, Jordi ha sido el primero en poner su nombre en el palmarés del Circuito Melia Hotels International Premium 2016 que se estrenó la semana pasada en Golf Maioris, Mallorca. No sólo ganó, el golfista de Castellón fue el único que jugó bajo par y se impuso con cuatro golpes de ventaja sobre el segundo. «Estoy jugando muy bien. Yo era un jugador de fade, un efecto que casi utilizaba por miedo a fallar por la izquierda, pero eso es precisamente lo que he cambiado con José Carlos. Ahora me pongo apuntando hacia la derecha y pegó al draw y me siento mucho más cómodo. El drive me ha estado matando en los últimos años y creo que he podido encontrar algo. No sólo he cambiado el efecto, también he hecho una sustitución en la bolsa. Estoy jugando el driver de PING G 30 y me encuentro mucho más cómodo, es más fácil de gobernar que el M1 que tenía antes», asegura a Tengolf.
Ya ven, Jordi no está jugando la partida con una mano delante y otra detrás, tiene cartas y sabe un rato de esto porque lleva muchos años. «Voy con todo y a ver cómo sale. Muchos amigos míos me dicen que si no me estoy metiendo demasiado presión con esto de decir que es todo o nada, pero yo lo veo al revés. Es la última oportunidad, pero no lo digo con desesperación, sino con muchas ganas e ilusión de que salga bien«, afirma.
García del Moral disputará este jueves la previa del Valderrama Open de España en el Centro Nacional de Golf. Pocas cosas le harían más ilusión que poder jugar el Open en la que ha sido su casa en los últimos meses. Además, Jordi ya sabe lo que significa ganarse una plaza en el Open de España a través de la previa. Después, jugará todo el Circuito Meliá Hotels International Premium 2016, algunas pruebas del Alps y confían en tener alguna invitación para el Challenge, un circuito con el que siempre ha estado muy involucrado desde 2007. Su próximo reto son las ligas mayores y está convencido de que puede hacerlo.
Su victoria en Maioris no es más que otra pista de que estamos ante un jugador de mucha categoría. Como decimos, seguirá jugando el circuito organizado por Gambito Golf y no sólo por su victoria, sino porque la organización fue «espectacular». Y añade: «Lo hemos estado comentando todos. Me ha sorprendido mucho. Nos hemos sentido como si estuviéramos jugando en un circuito mucho más grande. El trato ha sido sensacional, tenías comida y bebida en los hoyos 5, 9 y 15, más la carpa final de chill out, que era muy agradable, con dos consumiciones… Ha sido un éxito total y estoy convencido de que va a tener una vida muy larga este circuito», sentencia.
