Sergio García (-3) ha tenido un buen arranque en el Wyndham Championship. Tarjeta de 67 golpes en el Sedgefield Country Club y puesto 25º provisional a la espera de que se pueda completar la jornada este viernes, suspendida por tormenta eléctrica poco después de acabar el jugador de Borriol con 33 jugadores aún en el campo.
El resultado de Sergio no se puede decir que sea galáctico, pero sin duda supone un paso hacia adelante de donde venía. Este inicio debe reforzar su confianza, especialmente en lo que se refiere al putt, su gran caballo de batalla en las últimas semanas. Antes del Wyndham decidió dar un cambio de timón. Sustituyó el putter, incluso la marca (de Ping ha pasado a Scotty Cameron) y ha modificado también el grip. Ha dejado a un lado el de pinza, que utilizó por ejemplo en el PGA Championship, y ha recuperado el normal. No es la primera vez ni será la última que García realiza estos cambios de una semana a otra. Lo que busca es un revulsivo, una nueva dinámica, salir del atolladero… y, de momento, algo ha funcionado.
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Según las estadísticas del PGA Tour ha ganado respecto a los otros jugadores 2,33 golpes de media en los greenes. Este es su mejor registro en el circuito americano en todo 2020. Un paso adelante. Al menos, ha salido del atasco en el que estaba en el PGA Championship, torneo en el que cedió más de cinco golpes en los greenes en los dos días. Yendo a los números puros y duros, Sergio ha tirado once putts de entre dos metros y medio y seis metros en toda la vuelta y ha metido siete, una cifra más que interesante. De hecho, entre sus aciertos hay un putt de casi seis metros, otro de casi cinco y cinco de entre dos y cuatro metros. Un buen balance.
Sergio García hace un cambio en su bolsa buscando un revulsivo (VÍDEO)
Sin embargo, no es oro todo lo que reluce. El de Borriol también se ha dejado por el camino dos putts de metro y medio, de los que duelen, porque parece inevitable pensar que estás dando ventaja a tus rivales. Sea como fuere, la sensación final debe ser positiva. Puede que el cambio sirva para coger aire, aunque ahora hay que esperar a que asiente. El revulsivo ha funcionado y ahora resta ver si tiene continuidad.
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Más allás del putter, mejorado de manera ostensible, Sergio ha recuperado también su efectividad desde el tee, algo que no tuvo en el TPC Harding y que, sin duda, en su caso, es más preocupante. Hoy, por contra, ha sido el mejor del torneo en los golpes de salida. Estas sí son sus constantes vitales habituales. Así sí será más fácil verlo de nuevo arriba peleando por las victorias.
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Más allá de los españoles, el liderato está compartido por Harold Varner III, Tom Hoge y Roger Sloan con -8. De todos ellos, el más necesitado es Sloan ya que ni quedando tercero conseguiría meterse entre los 125 primeros de la FedEx Cup. En cuanto a los principales candidatos al triunfo, el mejor inicio ha sido para Patrick Reed (-5), seguido de Webb Simpson (-4) y Paul Casey (-3).
