El PGA Tour está expectante. Los periodistas norteamericanos también. Los aficionados USA cada vez buscan con más interés sus partidos en los tee times. Y allí todo el mundo se lo pregunta: ¿Cuándo va a jugar Álvaro Quirós en Estados Unidos?…
Ayer, nada más terminar su vuelta y después del fantástico 65 que colocó el viernes, cayó la cuestión. Le preguntaron a Quirós si se plantea trasladarse a Estados Unidos y jugar alrededor de 15 torneos al otro lado del Atlántico.
Álvaro lo tiene claro. Sabe que ha llegado el momento y quiere probarse. Sus únicas dudas aparecen en el plano personal, no en el deportivo. Así lo explicaba el español: «La única diferencia entre Europa y Estados Unidos es la compañía fuera del campo de golf. Lo que quiero decir es que dentro del campo de golf aquí soy feliz, me siento cómodo, pero fuera del campo estoy demasiado solo y es una situación difícil de llevar».
Quirós siente que de alguna manera ha llegado el momento. Sus primeros contactos con el golf en Estados Unidos fueron buenos. Jugó el WGC de Doral y firmó una extraordinaria actuación. Acabó 13º y con opciones el domingo de haber peleado por el triunfo. Sin embargo, a partir de ahí las cosas se torcieron. Jugó en Tampa y no le fue bien. Tampoco en el Shell Houston Open, ni en el Masters… En ese momento, aparecieron algunas dudas personales, pero la idea de jugar en Estados Unidos sigue fija y sólida en su cabeza. «Yo debo hacerlo ahora. Tengo 26 años y si no lo hago ahora, ¿cuándo lo voy a hacer? No me voy a ir a América, si no es mi casa, con 35, así que sería una buena idea venir ahora».
En cuanto a la situación personal, Quirós sabe que tendrá que afrontarlo: «Si quiero jugar aquí, tendré que aprender a manejar esa situación… Veremos qué pasa», concluye.
