Ángel Cabrera, ganador de la última edición del U.S. Open, fue recibido en Argentina en loor de multitudes a su llegada de Estados Unidos, donde el pasado domingo se hizo con su primer grande. A su llegada a Villa Allende, en la provincia de Córdoba. Con la bandera argentina sobre los hombros, Cabrera paseó el trofeo en un descapotable, entre cientos de personas que aplaudían y coreaban su nombre …
Cabrera, primer argentino que gana uno de los grandes torneos del golf mundial desde que Roberto De Vicenzo se hiciera con el British Open en 1967, hizo una parada en una plaza local para agradecer a una multitud de más de 200 personas su apoyo. Una pancarta leía: "Bienvenido, Pato. Ganador Abierto Golf EE.UU.". El hijo de Cabrera, también Ángel, resumía el júbilo de los argentinos: "Esto ha sido inesperado. Ganar el U.S. Open es como un sueño". Y por supuesto, la inevitable referencia al fútbol en la tierra de Maradona: "Es como ganar un Mundial".
Associated Press