Ha sido el fin de semana de los regresos. Si el Open de Irlanda nos devolvía a Fisher, Harrington y Gonzalo, al otro lado del Atlántico, en West Virginia, vivíamos la ‘resurrección’ de Stuart Appleby. El australiano se impuso en el Greenbrier Classic con una vuelta final de 59 golpes y uno de ventaja sobre Jeff Overton, que deberá seguir esperando para inaugurar su palmarés…
Appleby no ganaba desde 2006 y el año pasado anduvo muy cerca de perder la tarjeta del PGA Tour. El australiano firmó una ronda final de ensueño y se une al exclusivo club de los 59 (Al Geiberger, Chip Beck, David Duval y Paul Goydos). Es curioso. No se había firmado ningún 59 desde 1999 y este año ya llevamos dos: Goydos y Appleby. Eso sí, el ‘aussie’ ha hecho 59 golpes a un par 70, mientras que Goydos lo hizo a un par 71. Más mérito tienen los tres ‘pioneros’, que hicieron 59 a diferentes pares 72.
Appleby firmó 59 golpes tras hacer un eagle y nueve birdies, tres de ellos en el 16, 17 y 18. Un final explosivo para una victoria realmente inesperada.
Sergio García concluyó con una vuelta de par. Empezó a trompicones, con un bogey y un doble bogey en los hoyos 2 y 3 y a partir de ahí realizó cinco birdies y dos bogeys. El español ha ofrecido buenos síntomas de recuperación en este torneo, con rondas muy buenas de golf como la del sábado, pero aún le falta regularidad y consistencia para estar en los puestos más altos. Está más cerca y a la vuelta de la esquina tenemos el Bridgestone y el PGA Championship.
