Sergio García ha demostrado en dos días en el Travelers Championship que puede patear muy bien en los greenes del TPC River Highlands y que su juego de tee a green puede rozar la perfección. El asunto ahora es conseguir unir las piezas para que ambas cosas pasen el mismo día. Si lo consigue, no hay ninguna duda de que el jugador de Borriol tiene capacidad para firmar una vuelta muy baja y aún tiene margen de maniobra para darle un susto al líder, Bubba Watson.
Sergio firmó el viernes una vuelta de 68 golpes dando una exhibición de a green. Cazó 12 calles y 16 greenes. Rozó la perfección es unas condiciones, además, no estaban ni mucho menos asequibles. Sin embargo, el putt no le funcionó ayer con la alegría del jueves. Se dejó por el camino cuatro ocasiones claras de birdie de menos de cuatro metros y sus dos bogeys llegaron tras errar dos putts de metro y medio, el primero de ellos como amargo remate de un tripateo. Sergio se mostraba muy satisfecho tras entregar la tarjeta. Sentía que necesitaba pegar mejor a la bola y lo había conseguido.
Así las cosas, si Sergio consigue unir las piezas este sábado y domingo aún puede dar mucha guerra en la pelea por la victoria. Ahora mismo se encuentra en el top 20 del torneo, con un total de cinco bajo par. Está a seis golpes del líder, Bubba Watson, y a cuatro de la segunda plaza, ocupaba por Brian Harman, Brian Stuard y Carl Petterson.
Jon Rahm sigue en la pelea tras hacer 69 golpes, puesto 48º con un total de -3, y Gonzalo Fernández Castaño se quedó fuera del corte por un suspiro y tras un final de vuelta en el que todo lo que podía salir mal, salió aún peor.
