Basta con echar un vistazo rápido a la lista de jugadores que van a disputar el AT&T Byron Nelson de esta semana en TPC Craig Ranch para darnos cuenta de que este no es un torneo cualquiera. Los Rahm, Spieth, DeChambeau o el flamante campeón del Masters, Hideki Matsuyama, viajan esta semana a Texas para intentar conseguir una victoria que los afiance de cara al PGA Championship de la semana siguiente y dejar así su sello en este histórico campeonato.
Y es que para entender la grandeza de este torneo basta con prestar atención a la figura que le da nombre: Byron Nelson. Hablar de Nelson es hablar de uno de los mejores golfistas de la primera mitad del siglo XX, con un total de 52 victorias en el Tour y una racha increíble de 11 triunfos seguidos en 1945. Por supuesto, nadie a día de hoy ha osado acercarse a tal registro y pasarán muchos años más hasta que alguien se atreva a romper semejante récord.
Esas 52 victorias cobran más mérito aún sabiendo que se retiró con apenas 34 años y que 5 de esos triunfos fueron en Majors (2 Masters, 2 PGA Championship y 1 US Open). Estos logros colocan a Byron Nelson como el sexto jugador con más victorias en la historia y como uno de los siete golfistas que han conseguido 50 o más títulos a lo largo de su carrera. ¿Se imaginan si hubiese alargado su trayectoria 10 o 15 años más? Mejor no pensarlo…
Byron Nelson, un jugador de época
Efectivamente, estamos ante un golfista de otra especie. Todos estos méritos que comentamos le otorgaron el acceso al Salón de la Fama en 1974 y le hicieron merecedor de un honor de valor incalculable: ser el primer golfista del PGA Tour con un torneo bajo su nombre. A esto nos referimos cuando decimos que el AT&T Byron Nelson no es un torneo cualquiera. De hecho, se trata de la novena parada activa más larga del calendario en el circuito americano y una cita obligatoria para muchos de los mejores jugadores del mundo.
No es casualidad que el inigualable Arnold Palmer dijera en su momento que “Byron Nelson consiguió cosas en el circuito profesional que nunca se han visto ni se verán de nuevo”. Y es que este golfista ha registrado marcas insuperables. A la ya comentada racha de 11 victorias seguidas en 1945, podemos sumarle el hecho de que consiguió finalizar 65 veces seguidas entre los 10 primeros durante la década de 1940. Una absoluta barbaridad.
Apenas 14 años de carrera, pero más de medio siglo celebrando el legado de una de las mayores leyendas que ha dado nuestro deporte. ¡Y los que quedan!
