Rafa Cabrera Bello ha estrenado su tarjeta americana en el CIMB Classic con un valioso top ten. El canario finalizó la vuelta con dos birdies en el 17 y 18 y entregó una tarjeta de 70 golpes para un total de -13. Termina en la décima posición. Un final eléctrico para un bautizo de temporada americana más que notable.
Rafa ha hecho del buen resultado una maravillosa costumbre, hasta el punto de que se corre el inconsciente riesgo de restarle valor. Pero la realidad es que su juego se comporta como una maza sea donde sea: Europa, Estados Unidos o Asia. En Malasia ha hecho cuatro vueltas por debajo del par, tres por debajo de 70 y ha cazado casi un 85 por ciento de greenes en regulación en los 72 hoyos. Ha disputado cinco torneos regulares del PGA Tour en 2016 y ha sumado tres top ten. Números fantásticos que están al alcance de muy pocos jugadores en el mundo.
Precisamente, uno de los golfistas que tiene la bendita habilidad de moverse siempre en estas cifras, y muchas veces por encima, es Sergio García (-12). El jugador de Borriol ha terminado a sólo un golpe del top ten tras firmar también una tarjeta de 70 golpes en la última jornada. No es el resultado al que aspira García cuando empieza un torneo, ni mucho menos, pero tampoco ha estado tan lejos de verse más arriba. No ha conseguido darle continuidad al putt y tampoco ha estado excelso de tee a green. Sin estar brillante, consigue un top 20 que no es ningún desastre para poner en marcha la temporada.
Ambos arrancaron el domingo con la necesidad de una vuelta antológica y que Anirban Lahiri les echara una mano para tener alguna opción de victoria. Pues bien, el factor Lahiri sí se cumplió, hubo ayuda del líder, pero ni los españoles lograron la vuelta sideral que necesitaban ni Justin Thomas habría permitido otro ganador que no hubiera sido él. Estratosférica jornada del norteamericano que revalida el título con una vuelta final de 64 golpes. El CIMB Classic lleva cuatro años consecutivos de dos en dos. Ganó Ryan Moore en 2013 y 2014 y ganó Thomas en 2015 y 2016. Un más que digno sucesor.
Todos los focos apuntaban el domingo a Anirban Lahiri. El indio salió en busca de su primera victoria en el PGA Tour con una sólida ventaja de cuatro golpes y, sobre todo, mostrando una capacidad de birdie en los tres primeros días inaudita. Sin embargo, el golf puede ser terriblemente duro en algunas ocasiones y hoy lo tocó esa parte a Lahiri. En el hoyo 3, nada más empezar, mandaba su bola a una palmera y hacía cuádruple bogey. Drama. En menos de una hora había pasado de tener una ventaja de cuatro golpes a verse dos por detrás…
Thomas olió la sangre y se lanzó a la caza de la presa como un tiburón blanco. Nada que objetar. Su vuelta final en el recorrido West del Kuala Lumpur Golf Club ha sido sublime. No sólo ha hecho ocho bajo par, sino que salvo en el 17, donde metió un puro de casi veinte metros, todos sus birdies han sido desde distancias inferiores a los dos metros y medio. Ha sido un curso acelerado de golf. Lahiri reaccionó y consiguió acabar el día al par, pero su encontronazo con la palmera ya lo había sentenciado.
Finalmente, la victoria ha sido para Thomas (-23), con tres golpes de ventaja sobre Hideki Matsuyama, que venía de ganar en Japón la semana pasada, y cuatro sobre Derek Fathauer y Anirban Lahiri. Consulta aquí los resultados finales del CIMB Classic.
