Corey Conners (-9) es el líder en solitario del Arnold Palmer Invitational después de la segunda jornada. El jugador canadiense, sólido de tee a green como pocos, manda con un golpe de ventaja sobre Martin Laird y dos sobre Rory McIlroy, Viktor Hovland y Lanto Griffin. Conners ha conseguido mantener el tempo del primer día para seguir sacando provecho de su swing. Dos birdies, un eagle y un bogey han jalonado su vuelta para ponerse en cabeza.
Obviamente hay que poner el foco en McIlroy, que aguanta arriba aunque ha cedido el liderato, o en DeChambeau (-6), a tres de la cabeza y con las opciones intactas. También andan arriba, al acecho, golfistas con pedigrí como Paul Casey (-5), Sungaje Im (-5), Justin Rose (-5) o Jordan Spieth (-5). Hoy las condiciones por la tarde han sido bastante más complicadas que por la mañana.
Sin embargo, seríamos injustos si no miramos un poco más abajo y atendemos a la vuelta de Tyrrell Hatton (PAR), campeón del torneo el año pasado y autor de la gran remontada del día. Ha recuperado 69 puestos y ha conseguido pasar el corte cuando estaba prácticamente defenestrado. Hay que darle mucho mérito a los cuatro birdies consecutivos entre los hoyos 14 y 17 para meterse en el corte. Un arreón final de padre y muy señor mío. Un competidor de tomo y lomo, como decía Jordan Spieth el pasado miércoles.
Hatton estaba ayer fuera del torneo con una vuelta de 77 golpes y ha conseguido meterse en la pelea por todo después de firmar diez golpes menos el segundo día. Hay que quitarse el sombrero con el golfista inglés.
El corte se ha fijado finalmente en +2 y ha dejado fuera a jugadores como Patrick Reed, Henrik Stenson, Shane Lowry o Francesco Molinari.
