Ahí andan, apelotonados en un solo golpe de margen: Cabrera Bello (-6), García (-6) y Rahm (-5). A diez y once golpes del líder, Marc Leishman (-16), que va volando. El australiano entregó la mejor tarjeta el jueves (62) y ha vuelto a hacer lo mismo el viernes (64), así que domina con mano firme el BMW Championship y somete hasta la humillación al Conway Farms Golf Club.
La Armada, tan bien representada en el tercer playoff de la FedEx Cup, no encuentra sin embargo con claridad el camino. Es como si los tres, Rafa, Sergio y Jon, marcharan por la selva, machete en mano, avanzando eso sí, porque el caso es que siguen dentro de muchas peleas, pero a paso más lento. No fue el caso del canario en la primera ronda, ciertamente, pero una vuelta al par del campo en la segunda lo ha frenado, ya veremos si de un modo decisivo: Rafa necesita terminar en tercera posición y ahora mismo está a siete golpes de ese objetivo.
Sea como sea, el balance después de los primeros 36 hoyos no puede ser malo para los tres españoles, pues hay margen para hacer algo más que maquillar. Pero deja esa clara sensación de que hay un buen puñado de jugadores que hasta el momento sueltan lastre con mayor facilidad. Rafa, por ejemplo, tan equilibrado y rítmico el jueves, ha sufrido más con el juego largo el viernes. En el hoyo 15, par 4 corto, chipeaba y a punto estaba de hacer el eagle tras pegar la bola en el mástil. Acto seguido erraba en el 16 la salida (bogey) y luego en el 17 fallaba un putt muy corto para salvar el par… En unos minutos habíamos pasado de un razonable -9 a un real y frío -6. En fin, así son las cosas y el golf: Jason Day (-13) hacía hoyo en uno en el 17 y luego confesaba con honestidad que en realidad había fallado el tiro desde el tee…
Sergio, por su parte, lucha y viene haciendo resultado (vuelta de 68), pero no el suficiente, y de hecho ahora mismo estaría fuera del último playoff. Da la sensación de que al castellonense le queda una marcha más por meter. El caso es que hoy se ha vuelto a dejar buenas oportunidades, pero no remata. Y eso que en el hoyo 15 y en el 17 embocaba desde fuera de green… Sigue faltándole chispa en los greenes, brillantez, carrerilla… Llámenlo como ustedes quieran. Le hace falta una buena dosis de inercia y energía positiva.
David Lloyd
Algo parecido podríamos concluir de las primeras dos rondas de Rahm, aunque lo suyo en los greenes aún es más llamativo: el de Barrika sólo ha embocado un putt de más de diez pies (tres metros) para birdie en 36 hoyos. Demasiada ventaja la que está concediendo a todos en unos greenes francos, donde se está embocando mucho y largo.
