Jon Rahm atendía a los medios en rueda de prensa después de su victoria en Puerto Vallarta.
La ronda final. “El jueves y el viernes sentía que estaba en pleno control de mi juego, parecía que nada podía salir mal. El sábado jugué bien de tee a green, pero no convertí algunos putts. Y hoy… Me he sentido bien, pero me ha costado arrancar. Creo que estaba haciendo buenos swings desde el inicio, pero no conseguía dejarlas cerca y crear buenas oportunidades. Después, creo que jugué unos hoyos 6, 7, 8 y 9 magníficos, también en los hoyos 11 y 12 tuve mis oportunidades. Había hecho los birdies en el 6 y en el 7, pero creo que en todo ese tramo, del 6 al 12 pude haber obtenido una renta mejor. No lo conseguí y a partir de ese momento, es cierto, el putt de birdie en el 14 fue muy importante. Y también el par que salvé en el 15, porque hubiera sido frustrante perder tan rápido lo conseguido. Todavía no entiendo bien qué paso en el 17, porque ese putt lo sigo viendo totalmente recto… Hubiera sido algo más sencillo salir al 18 con dos golpes de ventaja, con todo ese estrés que se siente, pero el caso es que lo conseguí”.
El alivio del triunfo. “Este año estuve cerca de ganar en Hawai y en Torrey Pines, pero después no fue así. Seguí trabajando muy duro, aunque los resultados no fueran llegando y por eso estoy ahora muy contento. Ya me estaba cansando de responder a preguntas sobre estadísticas, el putt, el juego corto, esto y lo otro”.
Aquel domingo con Tiger en Augusta. “Yo sabía que estaba mejorando y esta semana se ha demostrado. Creo que el domingo con Tiger en Augusta me dio un poco de confianza. Estaba siendo demasiado técnico en mi enfoque, cuando yo soy sobre todo un jugador de sensaciones, así que aquel domingo me dije a mi mismo que sólo tenía que salir y golpear la bola de golf, dibujar los golpes, imaginar el vuelo de la bola y ejecutar. Y conseguí jugar tres bajo par en un día difícil y sin estar en mi mejor momento”.
