– Jon Rahm ha disputado hasta ahora cinco veces el TOUR Championship en el legendario recorrido de East Lake, la casa de Bobby Jones. Han sido exactamente las cinco últimas (2017-2021). Desde que se hizo profesional, por tanto, nunca ha faltado a esta cita, salvo en 2016, porque no jugó la temporada completa (se hizo pro en junio y eso sí, obtuvo la tarjeta del PGA Tour en un escaso puñado de torneos).
– Este hecho, el de haber disputado las cinco últimas ediciones de manera consecutiva, está al alcance de muy pocos. Es muy cara la entrada en este exclusivo torneo, donde sólo están los treinta mejores de la temporada. Sólo otros seis jugadores más hacen pleno de presencias en este periodo. A saber: Xander Schauffele, Justin Thomas, Tony Finau, Hideki Matsuyama, Patrick Reed y Dustin Johnson. Según se aprecia, faltan nombres como los de Rory McIlroy, Patrick Cantlay, Brooks Koepka, Webb Simspon, Cameron Smith, Jordan Spieth, Bryson DeChambeau o Billy Horschel, a los que en estos últimos cinco años les ha fallado la regularidad en la excelencia en algún momento. Tampoco aparecen otros como Scheffler, Morikawa, Hovland o Niemann, cuya eclosión al más alto nivel es más reciente. Matt Fitzpatrick, por su parte, actual Número 10 del mundo, se estrena este año en este torneo.
Como quiera que Johnson y Reed no estarán esta semana tras su marcha a LIV Golf, el pleno en las últimas seis temporadas sólo lo completarán Rahm, Schauffele, Thomas, Finau y Matsuyama. Vaya club. Valoremos por tanto la consistencia del español.
– En este periodo 2017-2021 el mejor resultado por debajo del par pertenece a Xander Schauffele (*), que atesora un impresionante acumulado de -54 en esas veinte rondas de golf en East Lake, a una media de 67,2 golpes por vuelta en este par 70. Justin Thomas es el segundo mejor, pues se va a -41 (67,95 golpes de media por vuelta). Y Jon tiene el tercer mejor registro con -34 (68,3 golpes de media por vuelta).
A continuación:
4. Rory McIlroy, -31 (en cuatro de las cinco ediciones)
5. Paul Casey, -20 (3/5)
6. Tony Finau, -18 (5/5)
7. Billy Horschel, -16 (3/5)
8. Dustin Johnson, -15 (5/5), Daniel Berger, -15 (3/5) y Viktor Hovland, -15 (2/5).
Es curioso, porque Patrick Cantlay, ganador la semana pasada del BMW, defensor del título de la Fedex Cup y uno de los grandes favoritos para ganarla este año, tiene un acumulado de -1 en estos cinco años en East Lake, habiendo disputado cuatro de las cinco ediciones.
– Schauffele, al igual que Jon, se estrenó en el TOUR Championship en 2017 y, igual que el vasco, no ha faltado a la cita desde entonces. Como se ha visto, su acumulado respecto al par es formidable, pero es que, además, en estas veinte rondas que ha disputado nunca ha entregado una tarjeta por encima del par. A lo más que ha llegado dos veces es a jugar al par del campo (70) y su mejor registro es de 64, que lo ha firmado en dos ocasiones. Jon, por su parte, tiene un mejor registro de 65, que ha firmado en tres ocasiones, y su peor resultado en un 74.
– Un detalle a tener en cuenta, en lo que respecta a LIV Golf. En la ‘Era Rahm’, la que va de 2017 a nuestros días, sólo 77 jugadores distintos han pasado al menos una vez por esta gran Final del TOUR Championship, incluyendo a los nueve debutantes en la cita de esta misma semana: Fitzpatrick, Hoge, Homa, K. H. Lee, Poston, Stallings, Straka, Theegala y Young. Pues bien, de estos 77, que evidentemente son los mejores jugadores del PGA Tour en las últimas seis temporadas, tan solo 16 han hecho el petate y se han marchado a LIV Golf: Johnson, Koepka, Mickelson, Reed, Sergio, Casey, DeChambeau, Bubba, Na, Oosthuizen, Ancer, Kokrak, Howell III y Pat Perez, además de Leishman y Smith, cuya marcha se hará pública cuando finalicen los play offs.
De estos 16, por cierto, hay siete que apenas han jugado un máximo de dos ediciones de las últimas seis del TOUR Championship: Sergio, Perez, Bubba, Mickelson, Kokrak, Oosthuizen y Howell III… Y sólo dos, Johnson y Reed, han hecho el pleno en el último lustro, aunque no son pocos, teniendo en cuenta que salen de un exiguo grupo de siete, como ha quedado explicado. Leishman y DeChambeau, además, han jugado cuatro de las últimas cinco.
– Si descendemos al detalle en la trayectoria de Jon Rahm en East Lake nos encontramos con datos de lo más sorprendentes, en la relación del español con este campo. Ni que decir tiene que su hoyo estrella es el 6, primero de los dos pares 5 del campo, donde ha hecho sus dos únicos eagles en veinte rondas, donde no ha firmado ni un solo bogey o peor resultado y atesora un acumulado de -14.
– De acuerdo, basta con sacar a la luz este tipo de datos para que inmediatamente comience a ocurrir lo contrario… Pero llama la atención que hay otros dos hoyos del recorrido de Atlanta donde Jon tampoco ha hecho nunca un solo bogey. Son el 2, par 3, y el 13, par 4. Para compensar, señalemos que su hoyo-némesis es el 8, el par 4 defendido por agua en todo el flanco izquierdo, donde Jon, en veinte vueltas, ha hecho dos dobles bogeys, tres bogeys y un solo birdie, para un acumulado de +6. Tampoco se le da bien el hoyo 14, el par 4 más largo del campo (en realidad es un par 5 que se juega como par 4 en el torneo). En esa ‘estación’ su acumulado es de +5, con siete bogeys y dos birdies en su haber.
– Lo del hoyo 9, el largo par 3 con el que finaliza la primera mitad del recorrido, tiene su misterio. En las primeras seis vueltas que Jon jugó en East Lake, las cuatro de 2017 y las dos primeras de 2018, le hizo un asombroso parcial de cinco birdies y un par. A partir de entonces, sin embargo, no ha vuelto a hacer ni un solo birdie y, muy al contrario, le han caído tres bogeys y un doble bogey.
– Y, para terminar, una curiosísima circunstancia que seguramente tiene los días contados, porque estadísticamente es muy complejo que siga ocurriendo: siempre que Jon le ha hecho birdie al hoyo 12, y es algo que ha ocurrido en cinco ocasiones, a continuación se lo hacía también al hoyo 13. De locos.
(*) Todos los resultados y medias de golpes están calculados sin contar, por supuesto, con el ajuste que se viene realizando desde la edición de 2019 en adelante, según el cual se asigna un hándicap a cada jugador según cómo haya llegado clasificado en la Fedex Cup, partiendo el primero, por ejemplo, con un acumulado de -10 antes de iniciarse el juego.