JT The Postman, el curioso apodo que J.T. Poston utiliza en las redes sociales, sirve perfectamente para explicar su actuación en las dos primeras rondas del John Deere Classic del PGA Tour. El golfista de Carolina del Norte, como en el título de la famosa película interpretada por Jack Nicholson y Jessica Lange a principios de los ochenta, ha llamado dos veces a la puerta del Open, el último major de la temporada al que accedería si consigue terminar entre los tres primeros este domingo en Illinois.
Para ello, el ‘cartero’ tendrá que saber administrar la cómoda ventaja que ha logrado en la clasificación con su doble exhibición en el TPC Deere Run de Silvis. Porque al sensacional 62 con el que abrió ayer el torneo, segundo consecutivo en jueves tras el que logró la semana pasada en el Travelers Championship, ha añadido hoy un más que notable 65 que le permite no solo alcanzar el ecuador como líder en solitario sino ampliar su distancia respecto a sus inmediatos perseguidores hasta los cuatro golpes.
This is getting ridiculous. @JT_ThePostman from WAY downtown. He leads by 3 @JDClassic 💪 pic.twitter.com/euSIw0ns2F
— PGA TOUR (@PGATOUR) July 1, 2022
Una tremenda serie de cuatro birdies consecutivos entre el hoyo 2 y el 5 le disparó en la clasificación nada más empezar su ronda. Y aunque cometió un bogey en el 6, supo volver a ganarle golpes al campo en el 9, el 10 y el 13 para dispararse hasta un espectacular 15 bajo par en 36 hoyos que le convierte en favorito número uno al triunfo. Una candidatura que pretenden echar por tierra jugadores como Denny McCarthy (-11), Matthias Schwab (-10), Christopher Gotterup (-10), Emiliano Grillo (-10) o Chris Naegel (-10), entre otros.
La jornada, interrumpida a media mañana por el mal tiempo, propició una vez más resultados muy bajos que situaron el corte en tres bajo par. Estas facilidades que está ofreciendo el campo son tal vez el principal problema para Poston, que con un auténtico pelotón de perseguidores por detrás, sabe que no puede cometer excesivos errores si no quiere comprometer su presencia en St Andrews en un par de semanas. Una cita especial, en el 150º aniversario del Open, que acaricia con 36 hoyos por delante.
Además, buscará aprovechar su margen para lograr la que sería su segunda victoria en el PGA Tour. La semana pasada, después de su 62 del jueves, entregó una tarjeta de 70 golpes el viernes que aun así le permitió terminar el Travelers en el segundo puesto empatado. Con mejores sensaciones y resultados que en Connecticut, mañana buscará refrendar su gran momento de juego en el ‘moving day’ para llegar a los últimos 18 hoyos con todo a favor para ganar… y hacer las maletas rumbo a Escocia.