“Quail Hollow está mucho más duro que la última vez que lo jugué en 2012. Es imperativo estar en calle”. Es palabra de Tiger Woods unas horas antes de que empiece el Wells Fargo Championship (arranca su vuelta este jueves a las 18.52, hora peninsular española).
Tiger Woods estrena ‘juguetes’ en el Wells Fargo Championship
Los greenes están firmes y rápidos (algo menos que en el pasado PGA Championship, eso sí) y será clave pegar desde calle para tratar de controlar la bola y poder dejarse así opciones de birdie. Desde el rough parece casi una quimera ponerla cerca del hoyo. En este sentido, hay que decir que los síntomas que ha ofrecido Tiger en la ronda de prácticas y en el Pro-Am son más que buenos. Aquí van algunos datos…
Tiger Woods: «Esta semana es imperativo estar en calle»
Ayer cazó once de las catorce calles y de las tres que falló sólo una fue con el drive. Otra fue con madera 3 y la tercera con hierro. Además, fue muy largo, algo que ya viene haciendo desde hace tiempo. Una buena muestra de la distancia de Tiger es el hoyo 15, par 5 de más de 570 yardas donde hizo birdie tras casi cazar el green de dos. En realidad lo cazó por distancia, pero la bola se acabó escapando del green por un lado. “Tal y como están los greenes necesitamos poder dar efecto a la bola para pararla, así que no queda más remedio que pegar desde la calle. Es la clave esta semana”, aseguraba Tiger tras el Pro-Am.
Otro durísimo test para el Tigre
En cuanto a los nuevos hierros, Woods también brilló a un nivel alto. Cogió doce greenes y dos de los que falló eran buenos tiros aunque se quedaron algo cortos. Obviamente es sólo el Pro-Am y nada tiene que ver con la competición, pero sí es una síntoma de cómo se encuentra el juego de Tiger. Según cuentan aquellos que lo han podido ver en directo estos días, el parón que ha tenido desde el Masters le ha servido para elevar aún más su nivel.
