Hace apenas unos meses ni siquiera tenía claro si había llegado el momento de pasarse a profesional. Eran dudas razonables, no desconocimiento. De hecho, si de algo se sabe en la casa de los Blair es de golf.
James, el padre, fue profesional y jugó en el PGA Tour. Fueron poco más de treinta torneos en los años ochenta. Ahora, su hijo, Zachary, sigue sus pasos. Está emulando a sus padres aunque los inicios son más prometedores que los de su progenitor. En apenas cuatro meses se clasificó para las finales del Web.com Tour, acabó segundo en el último torneo y ganó la tarjeta de la primera división. Este domingo, en su primer cita con los grandes, este chico de 24 años saldrá en el partido estelar, tratando de moverle la silla a un sólido Sang Moon Bae.
El coreano lidera con un resultado de -16 el Frys.com Open. Firmó 65 golpes en la tercera jornada en el Silverado Resort, demostrando recursos y nervios bien templados. Sacó un par excelente en el hoyo 16 (par 5), después de irse al obstáculo de dos. Pudo jugar sin tener que dropar, pero acabó salvando los muebles con un putt de unos cinco metros.
Catapultado por el resultado de este hoyo, “fue un par que me supo a birdie”, aseguró después, Bae hizo eagle en el 17, un par 4 al que ayer se podía llegar, y otro buen birdie para acabar en el hoyo 18, otro par 5. “Me siento cómodo con los cuatro golpes de ventaja, pero no se puede decir que esté hecho, y mucho menos con los últimos tres hoyos de este campo, donde puede pasar de todo”, afirma.
Su ventaja es importante, pero es cierto que en su estela se han colocado jugadores de peso. Al margen de Blair, a cuatro golpes, se encuentra a cinco Matt Kuchar, Brooks Koepka, Scott Langley y Martin Laird. A un golpe más están, entre otros, Retief Goosen, Hunter Mahan o Matsuyama.
