Sergio García se mostró satisfecho después de firmar una tarjeta de 69 golpes en la segunda ronda del Charles Schwab Challenge que, unida a su sensacional comienzo de torneo de ayer, en el que tiró 63 golpes, le permite llegar al fin de semana metido de lleno en la pelea por la victoria, con un acumulado de ocho bajo par, a dos golpes del liderato provisional.
«La verdad es que una vuelta muy peleada. Un poquito una pena porque sí que me he notado que los nueve primeros podía haber hecho muy pocas y los nueve segundos me ha costado un poquito más. Pero bueno, lo hemos peleado bien, un par de buenas salvadas aquí y allí, y acabar bajo par hoy siempre es positivo después de hacer una buena vuelta ayer», dijo Sergio nada más completar su segunda ronda en el torneo.
El de Borriol, además, aprovechó para recordar que el Colonial Country Club que acoge el evento fue el campo en el que conquistó su primer título en el circuito, hace dos décadas: «Sí, bien, la verdad es que muy bonito estar con posibilidades el fin de semana aquí en Colonial, donde gané mi primer torneo del PGA Tour hace 20 años. Esperemos que el juego esté a la altura y podamos tener buenas posibilidades el domingo».
Blanco o negro en este campo
En sus declaraciones para los medios estadounidenses, Sergio explicó cómo siente este campo: «Ha sido un poco blanco o negro para mí. El campo me gusta y siento que si mi juego funciona, si manejo bien el driver, puedo hacer un buen resultado. Es un recorrido que te pide mucho desde el tee, así que cuando no aciertas y estás fuera de sitio, tienes dificultades».
En cualquier caso, el español se ve con opciones para el fin de semana: «Obviamente me encantaría tener dos o tres golpes menos. Pero los últimos nueve fueron una pequeña pelea, con algunos pequeños fallos. Pero me gusta mucho el trabajo que he hecho con TaylorMade en las dos últimas semanas para tratar de ajustarlo todo lo mejor posible después de tres años sin estar con ellos».
