No, Gareth Bale no es profesional de golf, ni está a punto de hacerse, ni sabemos si algún día realmente dará ese paso. Hacemos esta matización por la interpretación que algunos medios de comunicación están haciendo de su participación en el AT&T Pebble Beach Pro Am la próxima semana. Como es lógico, el galés va a jugar el torneo como amateur, como un amateur invitado dentro del particular formato de esta cita del PGA Tour, por equipos, con un profesional al mando y tres amateurs. Bale será uno de esos amateurs. Es decir, va a participar como celebrity, uno de los tres amateurs que harán equipo como un profesional.
Es la primera incursión de Bale en el golf profesional de máxima élite desde que dejó el fútbol. Ha sido el propio internacional galés quien ha confirmado en sus perfiles de las redes sociales que ha sido invitado para participar en el AT&T Pebble Beach Pro-Am del PGA Tour que se disputará del 2 al 5 de febrero en el Pebble Beach Golf Links de California, en Estados Unidos.
Tras el pasado Mundial de Qatar, en el que su selección no logró superar la fase de grupos, Gareth Bale anunció su retirada del fútbol profesional. Una carrera marcada por los éxitos, con numerosos títulos y golazos que quedarán en el recuerdo de los aficionados como su chilena en una final de la Champions ante el Liverpool o su arrancada para conquistar una Copa del Rey ante el Barcelona, y también por las polémicas, en especial la que se generó después de que posara con sus compañeros de Gales con una bandera de su país en la que se podía leer, ‘Wales, Golf, Madrid‘, poniendo al que era su club, el Real Madrid, por detrás de su selección e incluso de su pasión por el golf.
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Gran aficionado a este deporte, ejerció de anfitrión en un torneo del DP World Tour en su país. Se le ha podido ver en numerosas ocasiones siguiendo rondas de jugadores como Sergio García en Valderrama. Durante sus vacaciones siempre ha aprovechado para jugar algunos de los campos más prestigiosos del mundo. E incluso ordenó construir la réplica de famosos hoyos en su anterior domicilio en la capital de España o instalar un simulador en la concentración del combinado nacional de Gales en Doha. Ahora, liberado de las exigencias del fútbol profesional y las polémica después de que en algunos medios se vincularan sus lesiones a su afición por jugar al golf, parece dispuesto a ir más allá en el deporte de los palos.
Por lo pronto, estrenándose en un torneo del PGA Tour como amateur invitado, como otros tantos muchos, como ocurre cada año con el actor Bill Murray, el jugador de fútbol americano Larry Fitzgerald o antes con Clint Eastwood, un clásico de este torneo. En Pebble Beach podrá ver de primera mano cuál es el nivel real de su golf junto a algunos de los mejores del mundo, aunque obviamente aún queda mucho para que pueda competir algún día con ellos.
