Gonzalo Fernández Castaño comienza hoy en Texas una maratón brutal de torneos que le llevará a jugar siete semanas de manera consecutiva. Son muchos los que se echarían a temblar viendo un calendario de este calibre, pero no es nada que el madrileño no haya hecho antes y, además, con final feliz.
Ya afrontó Gonzalo una maratón de torneos el año pasado y fue ahí, precisamente, cuando consiguió amarrar la tarjeta del PGA Tour, acabando en la cuarta posición en el Canadá Open, justo después de disputar el Open Championship en Royal Liverpool. Ese es el objetivo principal de Fernández-Castaño en los próximos 46 días: sumar los dólares suficientes para dejar liquidado por segundo año consecutivo sus derechos de juego en Estados Unidos para el próximo año. Es su obsesión, su gran objetivo, y no va a cejar en el empeño.
Gonzalo comienza hoy el AT&T Byron Nelson, torneo que se celebra en Irving, Texas, muy cerca del cuartel general de su actual entrenador, Randy Smith. Seguramente, el madrileño habrá aprovechado para pulir aún más estos días esos cambios de swing que poco a poco se están estabilizando, pero que siempre cuestan asentar.
Más allá del jugador español, el Byron Nelson contará con la presencia destacada de Jordan Spieth, Dustin Johnson, Matt Kuchar Brooks Koepka o Russell Henley. La semana viene marcada por la lluvia. Se espera por tanto un recorrido, el TPC Four Seasons, bastante receptivo y propicio para resultados bajos.
