Afrontar los 18 últimos hoyos de un torneo del PGA Tour con tres golpes de ventaja en la clasificación y firmar una tarjeta de 74, dos por encima del par y con cinco bogeys, es una losa insalvable prácticamente para cualquiera. Pero no para Ben Griffin (-18), empeñado por todos los medios en perder un Sanderson Farms Championship que tenía en el bolsillo, y que pese a ello, tuvo la fortuna de encontrarse con unos rivales igual de desacertados que él… o incluso más.
Si no, no se explica que tuviera la ocasión de llevar el torneo a un playoff a cinco, frente a Luke List (-18), Scott Stallings (-18), Henrik Norlander (-18) y Ludvig Aberg (-18), después de un recital tremendo de errores. Porque todos ellos, jugando mejor o peor durante el domingo, mandaron al limbo en sus últimos hoyos oportunidades más que de sobra para dejar un 19 bajo par en la Casa Club que habría sido suficiente para ganar el torneo y evitar un agónico y multitudinario desempate, con el sol cayendo sobre el Country Club de Jackson.
Griffin había empezado bien, con un birdie en el 2, pero un par de bogeys consecutivos al 8 y el 9 anticiparon lo que iba a terminar siendo un día aciago para él. Con birdies al 11 y el 14, y pese a un bogey más en el 13, el líder se mantenía a duras penas en la pelea, rebasado ya a mitad de tarde por jugadores como Norlander y Mark Hubbard (-17). Y a partir del 16, después de salvar una situación delicada en el 15, llegó su debacle. Bola al rough desde el tee, recuperación mala a una zona con unas instalaciones luminosas, approach largo después de aliviarse sin penalidad y putt fallado. Bogey.
En el 17, después de fallar la calle, recupera bien, pero perdona el putt de birdie. Y en el 18, después de que Hubbard se hubiera quedado fuera de la pelea con tres putts desde dos metros en el 17 y otro bogey en el 18, de que Norlander y Aberg perdonaran sendos putts de birdie poco antes en el 18, o de que Yuan, después de un tremendo eagle embocando desde la calle, jugara un catastrófico último hoyo, Griffin tuvo la oportunidad de ganar el torneo con un putt de un par de metros para birdie.
This close for the win …
We’re headed to a 5-way playoff @Sanderson_Champ. pic.twitter.com/aHxzAbC8C0
— PGA TOUR (@PGATOUR) October 8, 2023
Su madre y su hermano esperaban junto al green para celebrar una victoria que un par de horas antes parecía cantada. Pero el que esperaba que fuera su último golpe en el hoyo 72 del torneo, con el que estrenar su palmarés de victorias en el PGA Tour, terminó siendo el penúltimo, fallando por la derecha, y llevando el título a un durísimo desempate a cinco contra rivales que, como en su caso, pensaban que el pescado ya estaba vendido.
En el playoff, todos cazaron el green de dos menos Stallings y Norlander. Aberg pateó desde 18 metros y falló. Griffin, desde poco más de 12, y también falló. Stallings intentó embocar desde fuera sin éxito. Y Norlander, el que más cerca la dejó, tampoco hizo el birdie que necesitaba para prolongar el playoff. Porque en medio de este carrusel de intentos, emergió la figura de Luke List para meter un putt de más de 15 metros y poner patas arriba la grada del 18 en el Country Club.
WHAT A PUTT!
Luke List drains it from distance for the win @Sanderson_Champ 🔥 pic.twitter.com/KdIlrAjS57
— PGA TOUR (@PGATOUR) October 8, 2023
Un birdie extraordinario del golfista estadounidense, de 38 años de edad, para sellar su segunda victoria en el circuito. Su primer y único triunfo hasta la fecha, en 252 torneos, había sido en el Farmers Insurance Open de hace algo más de año y medio. El lugar, precisamente, en el que Jon Rahm estrenó también su palmarés en la gira. Esta tarde, ante la mirada de su mujer y sus hijos, el golfista de Seattle ha vuelto a ganar y, de paso, ha resuelto una situación delicada en su carrera.
Arrancaba la semana en el puesto 119º de la FedEx Cup, necesitado de puntos. Con este triunfo, además de asegurarse dos años más de exención en el PGA Tour, 500 puntos FedEx, plaza en los eventos que restan del calendario otoñal y un sitio en el torneo de campeones de Hawaii, en el THE PLAYERS, en el Masters y en el PGA Championship, escala casi 60 puestos, hasta la 61ª posición de la clasificación general, opositando ya a estar en los dos primeros eventos designados de 2024, el torneo de Pebble Beach y el Genesis. Y todo ello, aderezado con un bonito cheque por valor de 1.476.000 dólares… Un ‘purito’ de más de 15 metros para no olvidar en la vida.
