“Será interesante ver cómo puede influir en mi golf la victoria en el Masters de Augusta. Ojalá me ayude, pero nunca se sabe. Está claro que ganar el Masters no significa que a partir de ahora vaya a ganar todos los torneos en los que llegue al domingo con opciones, pero obviamente un triunfo así te da un extra de confianza. Estoy deseando verme otra vez con opciones de ganar y comprobar si puedo usar algunas de las cosas que me ayudaron en Augusta. Ojalá me sirva para ganar más veces”. Es palabra de Sergio García a las puertas de arrancar el THE PLAYERS Championship, primer torneo que disputa después de ganar el Masters de Augusta. No hay ninguna duda. El hambre del jugador español está intacta.
«Estoy deseando verme otra vez con opciones de ganar para comprobar si puedo usar algunas cosas que hice en Augusta»
Sergio no se conforma con haber ganado la Chaqueta Verde. Quiere más. Siempre ha querido más. Igual no lo dice de una manera grandilocuente o dejando titulares para la posteridad, pero su principal motor es ser cada día un jugador mejor. “Sé que todavía puedo mejorar y ese es mi objetivo. Hay que trabajar duro. Obviamente, ganar es muy importante, pero hay otras muchas cosas que puedes seguir haciendo para sentirte mejor jugador. A mí me encantan esas cosas. Me gusta mucho ver que año tras año he ido mejorando aquí o allí. Es la razón por la que hago lo que hago”, afirma.
Sergio ha aterrizado esta semana en una de sus tierras prometidas. El lugar no podía ser mejor para celebrar su triunfo en el Masters. Su objetivo, como siempre, es hacerlo lo mejor posible, aunque a nadie se le escapa que es uno de los favoritos al triunfo. “Me encanta este campo, sigo haciendo un buen swing, vengo con confianza, ojalá podamos seguir con la línea del Masters”, explicó.
«La alegría de mis compañeros por mi victoria es un reflejo del cariño y el respeto que nos tenemos»
Una de las constantes esta semana ha sido el cariño que ha recibido de sus compañeros de profesión. Hasta el mismo Sergio ha llegado a sentirse un poco abrumado. “Es muy bonito ver la alegría de los aficionados y de todos los que me han apoyado. Para mí ha sido muy especial sentir la reacción sincera de mis compañeros de profesión. No es una impostura. Veo realmente que se han alegrado mucho por mi victoria, más incluso que yo, y eso es muy bonito porque refleja mucho cariño y respeto. Un ejemplo concreto me ocurrió el lunes en el campo de prácticas. Se me acercó Shawn Stefani, que es un gran tipo y tenemos una gran relación, pero al que no veía desde hacía mucho tiempo, y me dio un abrazo enorme… Me sentí en sus brazos como una pequeña rama que se va a romper. Todo esto es muy bonito. Creo que valoran que siempre he sido el mismo en los últimos veinte años. Se alegran de que haya ganado una persona que es auténtica y que siempre he tenido respeto hacia ellos y he tratado de ser honesto”, asegura.
«Decidiré en el momento si en el 12 tiró a green desde el tee o juego corto»
A Sergio le gustan los cambios que se han hecho en el TPC Sawgrass. “El campo está espectacular y será un gran test. Los greenes, como siempre, están muy firmes y la bola rueda de maravilla. En el hoyo 12 no tengo totalmente decidido el plan. Se puede llegar de uno, aunque es un golpe muy, muy exigente. Si me veo bien y las condiciones se dan tiraré a green, pero si no, jugaré corto o a la esquina derecha del green para dejarme un chip desde esa zona. Lo iré viendo según el día”, explica.
«¿El mejor jugador del mundo sin un major? Yo no…»
También le hicieron la pregunta del millón. Una vez se ha quitado la etiqueta de mejor jugador del mundo sin haber ganado un major, ¿a quién se la pondría él ahora? “Lo único que tengo claro es que yo no soy”, bromeó. Y más en serio, añadió: “es difícil responder a esa pregunta. Hay muchos buenos jugadores que podrían y merecerían ganar un major. Así a bote pronto pienso obviamente en Rickie Fowler, Justin Thomas y, por supuesto, Lee Westwood. Estaría muy bien que todos ellos tuvieran pronto la oportunidad de ganar alguno”, remató.
