En torneos como el Barracuda Championship que el PGA Tour y el DP World Tour cosancionan esta semana en California y en el que jugadores sin plaza en el Open Championship de Royal Liverpool buscan un triunfo que les cambie la vida, hay que arriesgar para ganar. Sobre todo si tenemos en cuenta que se trata de un evento que se disputa en el formato de juego stableford modificado en el que los puntos que otorgan los eagles y los birdies marcan diferencias mayores que en el habitual stroke play.
Algo que hizo más y mejor que nadie este jueves el surcoreano S.Y. Noh (+23), que a su colección de birdies añadió nada menos que tres eagles, todos los que el Old Greenwood del Tahoe Mountain Club permite en condiciones ‘normales’, salvo cuando alguien logra embocar desde la calle o hace hoyo en uno. En los tres pares cinco del recorrido de Truckee fue a por todas, buscando el green con su segundo tiro y embocando sus putts. Un sensacional acierto que le permitió ponerse líder en solitario con hasta seis puntos de ventaja en la clasificación.
Noh fue el séptimo jugador del ‘field’ en distancia desde el tee (349 yardas) y el segundo mejor pateando en greenes en regulación (1,33 putts de media). Fue tan a por todas en cada hoyo que cometió un par de errores, pero su estrategia se confirmó como la más acertada, teniendo en cuenta que los bogeys sólo penalizan con un punto negativo mientras los birdies suman dos y los eagles… ¡cinco! Ni siquiera Beau Hossler (+17), que jugó de maravilla y logró incluso un hoyo en uno fue capaz de seguir el ritmo de puntuación del surcoreano en esta primera ronda.
A este festival de aciertos trataron de apuntarse Ángel Hidalgo (+8) y Sebastián García Rodríguez (+7), que si bien están algo lejos de la cabeza, mantienen intactas sus opciones de, primero, pasar el corte, y después, intentar ir a por todas el fin de semana en busca de un gran resultado. El malagueño arrancó su ronda de maravilla y en sus 11 primeros hoyos sumaba ya ocho puntos. Pero su producción de birdies se frenó hasta su 17ª bandera, no pudo sumar en el último par cinco de su ronda y terminó cometiendo dos bogeys en sus tres últimos hoyos.
La vuelta del madrileño fue bastante más descontrolada y terminó con un eagle, cuatro birdies, tres bogeys y un doble bogey. En su 11º hoyo del día alcanzó su puntuación más alta, nueve puntos, pero no fue capaz de sacarle partido al tramo final de su ronda y cometió también un par de bogeys al final que le retrasaron algunos puestos en la clasificación. En cualquier caso, para ambos, las posibilidades de superar la primera criba y mirar hacia arriba están intactas.
Más difícil lo tendrá Santi Tarrio (+1), que apenas pudo hacer un par de birdies en el turno de tarde y cometió tres bogeys que le situaron en la zona baja de la clasificación. Mañana se podría decir que ya no tiene nada que perder, así que es el momento perfecto para ir con todo a buscar banderas y tratar de exprimir al máximo los pares cinco, que como demostró el líder de la clasificación, son los que tienen la llave en este interesante evento que comparten la clase media del PGA Tour y del DP World Tour.
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