Jason Day no ha podido completar las cuatro jornadas de competición del BMW Championship, tercer playoff de la FedEX Cup que se juega en el recorrido Crooked Stick de Indiana. El golfista australiano se ha retirado al pinchar su bola en el tee del hoyo 9 de la cuarta vuelta.
El origen del problema es ya conocido por el Número 1. Ha sentido unas fuertes molestias en la zona lumbar de la espalda, una dolencia recurrente que ya le obligó a retirarse del BMW Championship en 2014, del THE Barclays en 2015 y a punto estuvo de dejarlo fuera de combate en el WGC Dell Match Play esta misma temporada. Torneo por cierto que acabaría ganando.
Day se ha retirado para evitar males mayores. Ha sido una decisión basada en la precaución. «Más vale prevenir que lamentar», aseguraba su agente, que añadía también que en principio no debería tener problemas para jugar dentro de quince días el The Tour Championship, la final de la FedEX Cup que se disputa en Atlanta. No obstante, tampoco se da por seguro. «Nos preocupan más los próximos quince años que los próximos quince días», apuntó el representante.
La idea del australiano es realizarse en las próximas horas una resonancia magnética para descartar una lesión importante. En cualquier caso, lo normal es que pueda jugar la Final de la FedEX sin problemas. Hay que recordar que ahora mismo es uno de los grandes favoritos a la victoria. Es uno de los cinco que depende de sí mismo para ganar la FedEX.
