Que alguien le diga a Jon Rahm que el exceso de halagos se supone que desgasta, porque no se da por enterado. En la primera jornada del Farmers Insurance Open, torneo en el que defiende título, el actual número dos del mundo ha seguido a lo suyo. Y lo suyo, con contadas excepciones, es encadenar la siguiente secuencia de golpes: drive a calle (o a sus inmediaciones), hierro a green y putt buscando el birdie. Su parcial en el recorrido sur del complejo de San Diego, un 68 que ya le sitúa entre los cuatro mejores del torneo, al acecho y a tres golpes del liderato que ocupa el estadounidense Tony Finau (que jugó en el campo norte).
Rahm, un sueño para el domingo y el Número 1
Rahm se batió con el recorrido sur con su mezcla habitual de contundencia y sutileza, ganando terreno desde el tee de salida y aplicándose en los tiros a bandera, trance decisivo en los bien protegidos greens de Torrey Pines. Salvo un error de apreciación que acabó derivando en un bogey en el hoyo 12, durante el resto de la vuelta estuvo amenazando todos los hoyos o convirtiendo algunas de las oportunidades que se procuraba, casi todas de corta o media distancia (no embocó ningún putt de más de siete metros). Aunque su buen toque no se vio recompensado y sus estadísticas con el palo más corto de la bolsa no son numéricamente brillantes, sobre los greens dio continua sensación de peligro. Además, se despidió de su querido hoyo 18 del recorrido sur de Torrey Pines, escenario de su primer triunfo en el PGA Tour, salvando un meritorio par después de haberse ido al agua tras un mal swing en este llamativo par 5 de cierre.
Las increíbles cifras de Tiger Woods en Torrey Pines
Por detrás del partido de recientes ganadores del torneo en el que figuraba Rahm, en una posición que alguno consideraría metafórica, llegaba Tiger Woods, dominador histórico de la prueba de San Diego y acaparador de titulares durante las últimas semanas. Es posible que los rectores del torneo decidieran liberar al californiano de parte de su “carga” al situarlo en un partido más tranquilo, o que pensaran que era injusto para el resto de los golfistas presentes en el torneo reducir el Farmers Insurance Open, al menos en sus dos primeras vueltas, a un duelo singular entre Jon Rahm y Tiger Woods, pero lo cierto es que se nos ha hurtado la posibilidad de ver a las dos máximas estrellas del torneo competir de tú a tú. En cualquier caso, a Tiger se le vio ágil y potente, aunque con el golpeo algo más desajustado que en el Hero World Challenge del pasado diciembre. Por otro lado, Torrey Pines poco tiene que ver con el amable campo bahameño donde se disputa el torneo auspiciado por el californiano, con lo que a nadie ha sorprendido que los resultados hayan empeorado. Aun así, buenas sensaciones generales y algún golpe mágico marca de la casa, como el hierro 6 que estuvo a punto de embocar desde el tee de salida en el 16. Al final, vuelta de par y mucho trabajo por delante de cara a su segundo compromiso.
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ÁLBUM de FOTOS: La galería de Rahm y Tiger tras la primera ronda
De momento, situaciones radicalmente opuestas para los dos principales reclamos del torneo: Tiger Woods está ahora mismo fuera del corte, a un solo golpe de franquear esa frontera, mientras que Jon Rahm tendrá que hacer esfuerzos notables para no empezar a pensar en la defensa del título y en el número uno del ranking mundial que conseguiría en caso de obtener la victoria. Una prueba más que tendrá que afrontar en soledad antes de disputar la segunda vuelta del torneo.
