Ya saben, Sísifo: condenado por los dioses a cargar con un peñasco hasta la cima de una montaña, momento en el que la enorme piedra caía de nuevo rodando hasta el valle, y vuelta a empezar, eternamente. Aviesas divinidades. Jordan Spieth (-7), acostumbrado en 2015 a llegar y besar el santo allá donde fuera, viene cargando con el peñasco varias semanas, para luego quedarse con la miel en los labios, al pie de la cumbre.
Le ocurrió en el Masters. Y la semana pasada en el Byron Nelson. También le pasó algo parecido en Doral, en Houston… Será más que interesante comprobar si es capaz de burlar esta vez la maldición en el Dean & Deluca Invitational. De momento, al 67 del jueves ha seguido un 66 el viernes, la mejor tarjeta de la jornada, aunque quedan muchos jugadores por finalizar su ronda, pues la inclemencia meteorológica no lo permitió. Pase lo que pase, no obstante, el tozudo y brillante jugador texano ya ha reservado de nuevo una plaza en los últimos partidos del sábado. Vuelta a empezar en busca de su segunda victoria de la temporada.
– Bryce Molder (-9), el líder tras la primera jornada, venía de nuevo hecho una fiera con un 30 por los primeros nueve del Colonial Country Club (Fort Worth, Texas), si bien un doble bogey en el 12 lo frenaba. Mantiene la cabeza provisional de la clasificación, pero aún le quedan tres hoyos para finalizar su vuelta. Hay jugadores a los que resta más de medio recorrido, como es el caso de Patrick Reed (-7), que tiene diez hoyos por delante para mejorar su excelente posición.
– Otros como Bryson DeChambeau (+3), Keegan Bradley (+4) o Ian Poulter (+10) ya han dicho adiós al fin de semana. Y hay quienes andan en el filo de la navaja, como Adam Scott, aunque al australiano, con un acumulado de +2, le quedan nueve hoyos por delante para darle la vuelta a la situación. Pincha aquí para consultar los resultados en directo.
