Inicio Grandes Circuitos PGA Tour Kevin Kisner gana el Wyndham en una tarde de dramas y euforias
Se impone en un emocionante playoff entre seis jugadores

Kevin Kisner gana el Wyndham en una tarde de dramas y euforias

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Kevin Kisner (-15) ha logrado la victoria en el Wyndham Championship, último torneo de la temporada regular del PGA Tour, en una tarde repleta de dramas… y de euforias. Y lo ha hecho de la forma más emocionante y curiosa posible. Después de perder cinco playoffs en toda su carrera en el circuito, a la sexta se llevó el gato al agua… ¡jugando contra seis jugadores!

Kevin Na (-15), Branden Grace (-15), Si Woo Kim (-15), Adam Scott (-15) y Roger Sloan (-15), además del ganador final, aprovecharon la horrible última ronda de Russell Henley (-14), que había liderado el torneo con una cómoda ventaja en las tres primeras rondas, para escalar a la primera posición y jugarse el triunfo en una muerte súbita que se resolvió en favor del golfista de Carolina del Sur en el segundo hoyo.

Henley, con un bogey en su segunda bandera del día, había dado ‘vida’ a sus perseguidores, que no tardaron en reducir casi a la nada el margen de tres golpes con el que arrancaba el domingo. Sin embargo, dos birdies en el 5 y el 8 volvieron a ponerle por delante en la clasificación. Y otro más, en el par cuatro del hoyo 10, pareció la sentencia definitiva. Pero nada más lejos de la realidad…

El de Georgia, que peleaba por su cuatro triunfo en la gira, primero desde hace cuatro años, sufrió un serio colapso con bogeys al 11, 12 y 14 que le descabalgaron del liderato. Un birdie en el par cinco del 15, en una ronda que se había convertido ya en una montaña rusa de emociones, le volvió a situar colíder, empatado con otros seis jugadores, pero el desenlace soñado se terminó convirtiendo en una pesadilla…

En el complicado par cuatro del 18, Russell arriesgó buscando trapo y terminó con su bola en el collarín. Un putt era posible desde allí y le daba la victoria, pero falló… Y el putt de vuelta, de poco más de un metro, terminó paseándose por el borde del hoyo para dejarle incluso fuera del playoff. Había pateado para ganar el Wyndham y terminó teniendo que ver el desempate entre seis de sus rivales desde la casa club del Sedgefield Country Club.

Pero el drama de esa última bandera no afectó únicamente a Henley, que dejó escapar un torneo que tenía prácticamente en el bolsillo. Minutos después fue el turno de Adam Scott. El australiano, que había jugado de manual el primer hoyo del playoff, esperó pacientemente a que todos sus rivales, desacertadísimos con los hierros, hicieran el par para tener su ‘match ball’. Sólo Sloan había ‘cazado’ el green de dos, pero no acertó con el putter.

Todo estaba preparado para que Scott celebrara su 15º título en el PGA Tour, con un putt de poco más de un metro, de los que pocas veces se le escapan. Pero sucedió lo inesperado: o su lectura de green fue horrible o lo fue su ejecución, una de dos, y terminó llevando el torneo al segundo hoyo de desempate… de nuevo entre los seis mismos contendientes.

En ese mismo hoyo 18 otro jugador había sufrido en sus carnes el drama del último evento regular de la gira. El inglés Justin Rose, premiado esta semana junto a su esposa Kate con el Payne Stewart Award, necesitaba al menos un top 10 para no quedarse fuera de los playoffs de la FedEx, que conquistó hace tres años. Llegó al último green de su ronda con todo en su mano para lograrlo. Pero terminó cometiendo un bogey que, pese a situarle exactamente en el puesto 10º empatado, por el resto de combinaciones terminó dejándole fuera de las series finales, justo en el puesto 126º, el siguiente al corte.

Pero volvamos al playoff: después del tremendo fallo de Adam Scott, con los seis aspirantes de vuelta al tee del 18, la historia se repitió. Aunque en esta ocasión, quien logró dejar su bola a poco más de un metro del hoyo fue Kevin Kisner. Esperó con calma a que uno a uno todos fueran perdiendo la oportunidad de hacer birdie y, cuando llegó su turno, no perdonó, firmando el cuarto triunfo de su carrera en el PGA Tour.

Kisner había ganado el RSM Classic en 2015, el Dean & Deluca Invitational de 2017 y el WGC Dell Technologies Match Play en 2019. Con este cuarto título se lleva a casa un cheque de 1.152.000 dólares, se mete en el torneo de campeones del próximo mes de enero, logra dos años más de exención en la gira y escala nada menos que 40 posiciones en la FedEx Cup, para situarse 29º, y dejarse muy a tiro la posibilidad de disputar el TOUR Championship en tres semanas.

En los playoffs que arrancan el próximo jueves con el THE NORTHERN TRUST estarán también Roger Sloan, que pese a perder el playoff sale del Wyndham con el objetivo que buscaba en el bolsillo, Scott Piercy, escalando del puesto 126º al 116º, y Chesson Hadley, clasificado de la forma más asombrosa posible: con un hoyo en uno. Su celebración a lo Champions League en el 16, cuando aún tenía más de media ronda por delante (partió desde el 10), ya presagiaba que ese golpe fantástico podía tener una influencia importantísima en su futuro…

Quienes se quedan fuera de las series finales, además de nombres ilustres como Justin Rose, Tommy Fleetwood y Rickie Fowler, son Bo Hoag, Patrick Rodgers y Ryan Armour, para los que fallar el corte fue determinante. Por cierto, desde que Phil Mickelson ganara el PGA Championship el pasado 23 de mayo, ningún jugador de los que han llegado líderes a la última ronda de un torneo del PGA Tour ha logrado ganar… Así de duros son los domingos en la gira estadounidense, más aún cuando hay tanto en juego como lo había hoy en Greensboro.

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