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Las andanzas de Jabato y el Capitán Trueno

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Sergio García y Jon Rahm. © Golffile | Ken Murray
Sergio García y Jon Rahm. © Golffile | Ken Murray

Dustin Johnson (-5) no cede. Tras ganar el primer play off de la FedEx Cup ya es líder en el segundo, el Dell Technologies Championship, tras la primera jornada. Vuelta de 66 en el TPC Boston en el turno matutino de juego y a otra cosa. Hace falta algo más que jugar bien al golf para batir a este jugador cuando anda con la confianza atada y bien atada…

Pero todo es cuestión de intentarlo. Como ha hecho, por ejemplo, el dúo español de moda, Sergio García (-4) y Jon Rahm (-4), nuestros particulares superhéroes ibéricos, Jabato y el Capitán Trueno, situándose cada cual a su manera a un solo golpe del liderato después de firmar las dos mejores tarjetas del turno de tarde, sendos registros de 67 golpes de gran valor, teniendo en cuenta que precisamente por la tarde las condiciones eran un poco más complicadas (greenes algo más duros, aunque de un modo quizá irregular).

Eso es, cada cual a su manera. Sergio arrancaba por el hoyo 10 con brío, muy fuerte, estrenando putter y buscando atajos precisamente en los greenes, muy certero, killer, enchufando puritos: uno de cinco metros en el hoyo 11 para birdie, otro de casi ocho metros en el 13 para birdie, uno más desde unos cuatro metros para salvar un buen bogey en el 14, y otro desde unos nueve metros para birdie de nuevo en el 16…

El efecto huracán se suavizaría más tarde con otros más cortos que no quisieron entrar, es la ley no escrita del golf, pero la faena estaba casi hecha y aún la remataba salvando un par magnífico en su último hoyo, el 9, cuando un error desde el tee más bien apuntaba al doble bogey (la bola rebotó en un árbol en lugar de adentrarse en la espesura). Un Sergio afilado, muy concentrado, seguramente no tan fino todavía como aquel que ganara el Masters, pero mostrando la versión más parecida a la del Augusta National de los últimos meses.

A Rahm le costaba más entrar en materia, nadar en los números rojos, aunque enseguida enjugaba el bogey tempranero del hoyo 1 con sendos birdies. Pero su final era rutilante, avasallador: tres birdies consecutivos para finalizar la ronda y cuatro en los últimos cinco hoyos del recorrido de Massachusetts. Y ahí está de nuevo el vasco, como la pasada semana, como buena parte de la temporada de su estreno profesional. No perdamos la costumbre de frotarnos los ojos, de sorprendernos y de gozar con sus andanzas, con las de él y las de Sergio, que capitanean desde el top-ten mundial la revolución española de 2017.

Rafa Cabrera Bello (+1) ha sido y es algo más que la ‘mano derecha’ de estos dos monstruitos. Se ha ganado a pulso sus propias estrofas y el foco protagonista. Y hoy terminaba arreglando una vuelta que tenía más que controlada en el hoyo 9 y que parecía salirse de los raíles con dos tripateos en los hoyos 10 y 11. El canario sale el sábado a jugar en el turno matutino, igual que Jon y Sergio, con la misión de ganarse desde ya mismo un merecido puesto en el tercer torneo de los playoffs. De momento da la sensación de que ha cerrado la hemorragia de bogeys de sus últimas comparecencias. A partir de ahí, si de verdad termina de cerrar la cuadratura de la confianza, habrá que contar también con el tercer jinete hispano, pues al fin y al cabo anda a cuatro golpes del top-ten (un top-30 en el torneo le asegura la plaza en el tercer playoff de Chicago y ahora marcha en el puesto 42º).

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