– Tony Finau está siendo una de las sensaciones del Memorial Tournament después de las dos primeras jornadas. No en vano, lidera la clasificación junto a Ryan Palmer. Además, también lo ha situado en el candelero su directa declaración de intenciones respecto al ‘método DeChambeau’, que consiste básicamente en pegar muy duro y a ser posible muy recto (qué fácil se dicen las cosas). Asegura el bueno de Finau, un tipo sencillo y afable donde los haya, que DeChambeau le ha inspirado y que lleva ya un tiempo trabajando con su entrenador un sensible incremento en la velocidad del palo y de la bola, así como el control necesario para además estar en juego. Hace poco subía a Instagram un swing en el que alcanzaba las 206 millas por hora de velocidad de bola y ciertamente está pegando muy duro en Muirfield Village: “en competición nunca he ido al ciento por ciento de potencia, porque sentía que no tenía el control suficiente, pero yo diría que en estas dos primeras jornadas es la primera vez que he estado en torno al noventa por ciento”, señalaba ayer al acabar.
Rahm, fresco como una lechuga y lúcido como un veterano
Pero no todo es la potencia e ir muy largo. Hay que hacer muchas cosas bien esta semana para liderar el Memorial, aunque antes de arrancar el torneo Tony ya sospechaba que las cosas podían irle bien. Y se apoyaba en un hecho que era algo más que un indicio: el viernes pasado Finau jugaba una ronda de entrenamiento en el Victory Ranch Golf Club, un campo par 72 situado en Utah, estado donde él nació y donde tiene residencia, y firmaba una mayúscula tarjeta de 59 golpes, batiendo por tres el récord del campo que él mismo tenía hasta entonces.
VÍDEO | El mejor resumen de la segunda ronda de Jon Rahm en el Memorial
El asunto podía haber ido aún mejor, puesto que saliendo del green del 16 marchaba -14, pero firmaba un bogey en el 17, un par 3 muy largo, pues desde el tee de atrás hay más de 250 yardas a según qué bandera… ¿Un par 3 muy largo? Obviamente, con esa longitud lo es, pero caben algunos matices. Para empezar, entre el tee desde el que pegó Finau y el green hay un desnivel hacia abajo de veinte metros, con lo que el estadounidense ya estaba cogiendo menos palo, pero es que además hay que contar con que el Victory Ranch Golf está emplazado a más de 2.000 metros de altura sobre el nivel del mar… No conocemos las condiciones exactas de juego (el viento que hacía, por ejemplo), pero lo gracioso del asunto es que, en vista de cómo está pegando a la bola y de la situación del campo y el dibujo del hoyo, no debe descartarse que tuviera en sus manos un hierro 8.
La valiosa lección que nos ha dejado hoy Tiger Woods en el Memorial
“No sé cuántas veces he estado -14 después de 16 hoyos en un buen campo de golf”, ha comentado con gracia el jugador, “pero fue algo que me hizo pensar que estaba en buena forma”, concluía sonriendo.
– Sigamos con Finau y un aspecto técnico y táctico muy concreto. Todos estos grandes jugadores son capaces de producir el llamado spin lateral en sus tiros a green, pero ya no son tantos los que incluyen este recurso habitualmente, o con gran naturalidad, a la hora de diseñar un golpe en el campo en rondas de competición. Tiger Woods, por ejemplo, lleva décadas impartiendo magisterio al respecto y Tony Finau utiliza esta herramienta de manera asidua y pronunciada, provocando muchas veces ese efecto lateral, ya sea a izquierda o derecha, para acercarse más a la bandera sin tener que arriesgar tanto, por ejemplo, al elegir la línea de ataque al green.
El jugador de moda sucumbe ante una liada del 10
– Muirfield Village sigue siendo protagonista estelar del torneo. El jueves sólo 24 jugadores ganaron al campo y ayer, con muy poco viento, llegaron a 40. Pero la cuestión es que es necesario jugar muy bien para ganarle la pelea al legendario recorrido de Nicklaus. Los greenes ya mostraban tonos pardos ayer por la tarde, duros y rápidos, y hoy se espera aún más calor y muy poquito viento. El domingo, sin embargo, las previsiones hablan de rachas de hasta 40 kilómetros por hora, así que la emoción y las alternativas están casi aseguradas en la ronda definitiva. Además, el porcentaje del 40 por ciento de posibilidad de lluvia que se daba para esa cuarta ronda, ha descendido hasta un 20 por ciento en las previsiones. Hay que atarse, porque vienen curvas…
Sergio pasa el corte, pero necesita recuperar el pulso desde el tee
– El Memorial está cumpliendo este año su 45ª edición, pues se ha jugado ininterrumpidamente en Muirfield Village desde el año 1976. En este tiempo, el botín de la Armada española es más bien escaso, para qué nos vamos a engañar. Asciende básicamente a un excelente segundo puesto de Sergio García en 2001 y a un notable décimo puesto de José María Olazábal en 2003. Ni un top ten más. Es posible que Jon Rahm tenga algo que decir al respecto esta semana…
Un ajuste clave en los palos y esa bola en el campo de prácticas
– Ryan Palmer fallaba el corte la semana pasada en este mismo campo y hoy es colíder del cotarro. Hace siete días sumaba 158 golpes en las dos primeras jornadas (tarjetas de 77 y 81), 23 golpes más de los que lleva sumados esta semana en las dos primeras rondas (135), cifra que le ha llevado a lo más alto de la tabla. Que no se diga que el texano tropieza dos veces, o tan seguido, en la misma piedra…
