Ben Martin ha pasado únicamente dos cortes en los últimos nueve torneos que ha disputado en el PGA Tour. Eso sí, en ambas ocasiones, Puerto Rico y RBC Heritage, acabó tercero. Así que habrá que tenerlo muy en cuenta esta semana después de arrancar el Zurich Classic of New Orleans con una fabulosa tarjeta de 62 golpes, récord del TPC de Louisiana.
Martin (-10) se ha colocado en cabeza del torneo con dos golpes de ventaja sobre Andrew Svoboda y tres sobre Peter Hanson y el coreano Seung Yul Noh. El joven líder de Carolina del Sur tiene aún más mérito si tenemos en cuenta que jugó por la tarde, con las peores condiciones por el viento que se levantó en el recorrido de New Orleans. De hecho, prácticamente todos los jugadores de la mañana acabaron bajo par, un respiro después de dos semanas muy duras (Masters y Heritage), mientras que por la tarde hubo algún que otro tropezón serio.
Seis de los últimos nueve ganadores de este torneo, uno de los que tiene el perfil más bajo de la temporada americana, estrenó aquí su palmarés, un dato que además de curioso puede insuflar energías y motivación a Martin, un destacado jugador universitario que lleva ya algún tiempo tratando de romper el cántaro como profesional.
Pero no toda la emoción del jueves fue para el joven Martin. Tuvo su cuota importante de protagonismo el veterano ex Número Uno del mundo, David Duval. Firmó 68 golpes, su primera ronda sin bogeys en casi dos años y lanzó en mensaje al mundo: “cada día me encuentro mejor, físicamente he perdido peso y estoy en muy buena forma y mi swing se está poniendo a punto. Así sí puedo volver a ganar algún día”. Se trata, sin duda, de una fantástica noticia para el golf. No en vano, Duval es de los pocos que ha podido poner en aprietos a Tiger Woods durante su más tiránica dominación.
