Parecía que los enganchones a cuenta de LIV Golf entre los profesionales habían pasado a mejor vida desde que el acuerdo entre el PGA Tour y el Fondo Soberano de Inversión Saudí parece cada vez más próximo, sin embargo no es así, al menos para Phil Mickelson, quien ha acusado a Fred Couples de poca clase y de realizar comentarios idiotas a cuenta de una revelación.
Todo empieza en una entrevista que Couples concedió a la radio 93.3 KJR tras recibir un homenaje en su ciudad natal de Seattle. Cuando se le preguntó por LIV Golf señaló que no tenía mucho que decir, aunque más tarde apuntó que mantenía un contacto regular con Brooks Koepka, charlaban a menudo y desveló es que el cinco veces campeón de Grandes quiere regresar al PGA Tour. «Quiere volver. Créanme, él realmente quiere volver y jugar el PGA Tour», dijo exactamente Couples.
El comentario, obviamente, fue difundido por diferentes medios de Estados Unidos y rápidamente se amplificó. No parece que a Brooks Koepka le haya molestado, o desde luego no se ha pronunciado al respecto públicamente. A quien no le ha hecho ninguna gracia es a Phil Mickelson, que sigue ejerciendo el papel de guardián de la fe de LIV Golf. Desde luego, se lo ha currado y sus intereses tiene en la causa.
Mickelson utilizó sus redes sociales para atizar a Couples. En su cuenta de Twitter escribió: «Si no es verdad dañó una relación que le importa. Si es verdad, le quitó a Brook [sic] el control de la línea de tiempo y la narrativa. De cualquier manera esto es un movimiento de clase baja e idiota por parte de Fred». Más o menos se puede decir que se metió donde no le llaman. De hecho, minutos más tarde borró el mensaje de su cuenta, aunque no sabemos los motivos. Hoy miércoles ha comparecido en una rueda de prensa en Hong Kong, como presentación del torneo de LIV de esta semana, y no se ha hecho mención al asunto. No se caracterizan precisamente por recibir preguntas comprometidas o incómodas en los torneos saudíes.
Hay que decir que la relación entre Couples y Mickelson hace tiempo que no atraviesa por su mejor momento. De hecho, el ganador del Masters de Augusta en 1992 dijo de él que estaba «chiflado». La cena de campeones del major de la Chaqueta Verde está cada vez más cerca y va cogiendo color.
