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Nacido para liderar un 4 de julio…

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Billy Hurley III manda en el The Greenbrier y Tom Watson y Gonzalo Fernández Castaño pasan el corte

No es fácil decidir cuál de las historias de la segunda ronda del The Greenbrier Classic es más interesante. Aquí van los titulares: el liderato del teniente Hurley, la enésima machada del capitán Watson, los 19 putts de Matteson y la garra de Fernández Castaño. Por partes…

Imposible pensar en un líder mejor que Billy Hurley III para un torneo del PGA Tour un 4 de julio, Día de la Independencia de Estados Unidos. Atención a la hoja de servicios de este muchacho de 32 años. Sirvió durante cinco años en la Armada de los Estados Unidos, la Armada-Armada, la naval, no la figurada. Rápidamente ascendió al rango de teniente y entre 2007 y 2009 llevó los mandos del destructor Chung-Hoon durante la Guerra del Golfo. Su misión era proteger los pozos petrolíferos de Irak. Hurley III fue considerado uno de los mejores pilotos de la Armada, sin embargo su gran pasión siempre fue el golf. Llegó a ser sexto en el ránking mundial amateur y ganó la Walker Cup en 2005 y fue capitán de la Palmer Cup en 2004.

Así, en 2010 decidió regresar al golf ya como profesional. Jugó el Nationwide en 2011 y ganó la tarjeta del PGA Tour, pero la perdió al año siguiente. El año pasado volvió a brillar en el Web.com Tour y recuperó la tarjeta de la primera división, eso sí, aún sin victorias en su palmarés profesional.

Hurley III lleva una temporada sólida. Prácticamente tiene la tarjeta asegura para el año próximo, pero quiere conquistar ya su primer torneo. En el The Greenbrier se le presenta una gran oportunidad. Partirá en el fin de semana con un golpe de ventaja sobre Kevin Chappell y Chris Stroud y dos sobre Troy Matteson.

Precisamente, Matteson ha hecho la burrada del día, y no tanto por los 61 golpes de su tarjeta, que ya tiene tela, sino porque sólo ha tirado 19 putts. Es algo que no se veía en el PGA Tour desde el año 2010 y se ha quedado a uno del récord absoluto. Hizo trece greenes a un putt, embocó dos de fuera y tres a dos putts. Impresionante. Así todo es un poco más fácil.

Pero el protagonismo hoy no sólo le corresponde al teniente Hurley. Una vez más hay que quitarse el sombrero con el capitán Tom Watson. El veterano jugador de 64 años ha firmado una tarjeta de 68 golpes y ha pasado el corte con un total de -1, los mismos golpes que Gonzalo Fernández-Castaño.

El madrileño ha sufrido un dura jornada, como todos los que jugaron por la tarde. Se levantó el viento en el The Old White TPC y puso las cosas muy difíciles a todos. De hecho, por la tarde nadie fue capaz de dar caza a Hurley. Gonzalo apenas cazó nueve greenes, pero consiguió la friolera de siete recuperaciones. Chapeau. Se gana otro fin de semana, el quinto consecutivo si no contamos el US Open. Además, aquí en el The Greenbrier hay licencia para soñar. La tabla está apretada y se pueden hacer vueltas muy bajas.

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