J.B. Holmes es el líder del PGA Championship, último grande de la temporada, con -1 después de dos días. La última vez que en el ecuador del PGA hubo un resultado tan elevado fue en 1972. 36 años han tenido que pasar para que los mejores jugadores del mundo vuelvan a someterse a una auténtica tortura …
Los datos de este PGA son muy llamativos. Pero más elocuentes si cabe, son las quejas de los jugadores. Casi nadie está contento y todos ponen de ejemplo el US Open último en Torrey Pines. Era un campo exigente, pero jugable. Oakland Hills es un potro de tortura, una lucha por sobrevivir cerquita del par. Sin alardes. El rough, los greenes, las posiciones de bandera… No hay alivio para el jugador.
Fíjense en este dato. En seis hoyos de los 18 de Oakland Hills no se llegaron ni siquiera a diez birdies en toda la jornada de viernes. Les recuerdo que juegan 156 golfistas. Posiblemente los mejores 156 jugadores del mundo.
La media de golpes ayer superó por mucho los 74 golpes. Es decir, el par del campo el viernes fue de casi +5. Una barbaridad. The Monster se está portando como tal.
Sergio es uno de los que mejor está jugando, aunque también ha sufrido las consecuencias del duro recorrido. Ayer hizo cuatro putts en el 17 que le costaron un doble bogey. La última vez que Sergio hizo cuatro putts en el PGA Tour fue en 2005, durante el Barclays. En total ha hecho sólo cinco.
Es la primera vez que J.B. Holmes lidera un 'major'. La última vez que un jugador estrenó liderato en los grandes en el PGA fue Shaun Micheel y se llevó el triunfo final..
Sergio García está buscando su primer grande. El PGA es un buen aliado para conseguirlo. No en vano, 44 jugadores consiguieron aquí su primer major.
La jornada empieza en breve, aunque Sergio García no saldrá a las 19,50, en compañía de Ken Duke. Uno de los partidos a vigilar será el de Ben Curtis y Justin Rose, autores ayer de la mejor ronda del PGA hasta el momento con -3. El inglés aseguró ayer que había hecho la mejor ronda de golf del año.
