Una hora antes de que Sergio García saliera a jugar la tercera ronda del Wyndham Championship, Rafa Cabrera Bello (-9), que había salido en los primeros partidos tras el accidentado final del viernes con dos bogeys, estaba firmando ya una espléndida tarjeta de 65 golpes en la casa club del Sedgefield Country Club, y eso a pesar de haber finalizado con bogey en el 18, igual que el viernes.
Sergio: un 65 que es aún más importante de lo que parece
El canario ha hecho un gran trabajo y sus opciones de victoria están en manos de otros. Lo normal, no nos engañemos, es que la remontada se haya quedado algo corta y al final del día el liderato se marche demasiado lejos de sus posibilidades, pero en todo caso terminará muy arriba en la clasificación y con opciones de redondear el domingo una gran semana, sumando puntos para la Ryder y en la estimación de Bjorn, cuyas cuatro elecciones penden hoy de mil hilos.
El canario arrancaba con bogey en el hoyo 2, pero rápidamente enseñaba que los tiros no iban por ahí, sumando hasta cinco birdies en los siguientes ocho hoyos. Rafa se ha mostrado fiable y poderoso desde el tee (lástima esa escapada por la izquierda en el 18), ha pateado para eagle en los dos pares 5 del recorrido de Carolina del Norte y en general se ha mostrado fino en los greenes, aunque se haya dejado alguna buena opción por el camino, porque lógicamente no todas van para adentro (hasta ocho birdies sumaba en esta tercera ronda).
Rory McIlroy se ‘borra’ del primer playoff de la FedEx Cup
Excelente su esfuerzo, orientado al ciento por ciento hacia la Ryder, porque de otro modo no estaría jugando en Greensboro esta semana y sí velando armas para el primer playoff de la FedEx Cup, el Northern Trust de la semana que viene. Queda meridianamente claro que no bajará los brazos mientras exista una posibilidad de meterse en el equipo, ya sea a través de las listas clasificatorias o de las elecciones del capitán.
