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Rahm mantiene el pulso en un día de máxima exigencia en Torrey Pines

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Jon Rahm © Golffile | Phil Inglis
Jon Rahm © Golffile | Phil Inglis

El indiscutible protagonista de la segunda ronda del Farmers Insurance Open de San Diego fue el estadounidense Ryan Palmer (-10), líder en solitario del torneo con dos golpes de ventaja. El golfista texano exprimió al máximo las extraordinarias condiciones que ofreció hoy el campo norte de Torrey Pines para firmar una ronda prácticamente inmaculada, de 62 golpes, con la que logró escalar hasta 70 posiciones en la clasificación.

Palmer, con un juego sólido de tee a green y un acierto asombroso con el putter, logró hasta 11 birdies para rozar el récord del campo en un torneo del PGA Tour. Un único error en el 18, que le obligó a visitar el rough y terminó saldándose con su único bogey del día, le impidió igualar el 61 con el que, por ejemplo, Brandt Snedeker abrió su participación en este mismo torneo en el campo norte en la edición de 2007.

Precisamente Snedeker (-8), ganador del Farmers en 2012 y 2016, se ha convertido en el principal rival de Palmer por la victoria después de confirmar el extraordinario vínculo que le une a este recorrido y firmar una gran tarjeta de 67 golpes en el campo sur, con siete birdies y dos bogeys. El golfista de Tennessee, con un excelente juego de hierros, sólo ha necesitado ‘cazar’ el 50% de las calles para ser uno de los mejores en el temido escenario de las dos rondas finales del torneo.

Junto a Brandt, compartiendo partido, estaba Rory McIlroy (-4), que si en los primeros nueve pareció lanzarse a la pelea por el liderato, sufrió una desconexión en la segunda mitad del campo sur de Torrey Pines donde apenas pudo sumar seis pares y tres bogeys, uno muy doloroso en el 18, para caer fuera del top 10 con una tarjeta de 73 golpes. Aunque la gran batalla del día se libró pocos metros por detrás de Snedeker y el norirlandés…

El duelo entre Jon Rahm (-5) y Tiger Woods (-4), con Collin Morikawa (-5) como espectador de lujo, volvió a acaparar todo el interés de los aficionados de San Diego, que disfrutaron de momentos de euforia, en especial entre los hoyos 6 y 10, y sufrieron en la durísima parte final del campo sur viendo a sus ídolos pasar enormes dificultades para no perder demasiada distancia en la clasificación.

Pero vayamos por partes. Para Jon, el día pudo ser mejor, pero lo que sí pudo ser es muchísimo peor. Empezó mal, con bogeys en el 1 y el 4, que compensó con un birdie en el 3. Y logró enderezarse definitivamente entre el 6 y el 8, con tres birdies consecutivos, el último, embocando un putt de casi seis metros que puso en pie a la bulliciosa afición de Torrey Pines. Aunque lo que parecía un camino de rosas hacia el liderato se empezó a torcer a partir del 9…

Un error con una madera 3, después de un buen drive, pareció descentrarle. Y a partir de ahí, ya nada volvió a ser lo que parecía. En el 10, el fallo fue desde el tee, y aunque logró una recuperación mágica desde el rough, no fue suficiente para hacer birdie. Y en el 11, otro mal tiro le llevó a la arena. Así, compaginando grandes recuperaciones con fallos clamorosos, fue sobreviviendo a duras penas a los segundos nueve hasta que en el 17 no pudo salvar el bogey.

La ronda se le pudo ir de las manos en el 18 al pecar de ambicioso buscando el green con su segundo tiro, después de haber caído en el búnker de calle. Aunque la suerte le sonrió y su bola terminó golpeando en una espectadora, por la parte derecha, evitando el fuera de límites casi de milagro. Un approach desde la moqueta y dos putts fueron suficientes para cerrar una ronda de 71 golpes que le permite seguir ‘vivo’ en el torneo.

La vuelta de Tiger fue prácticamente calcada a la de Jon, aunque terminó más arriba, con un birdie en el 18 que le permitía también jugar bajo par en el campo sur. Los dos intentarán desde mañana reducir distancias con Palmer, íntimo amigo de Rahm y con el que ganó el pasado año el Zurich Classic of New Orleans, que se juega por parejas.

El corte, como ayer, se mantuvo en -1, dejando fuera del torneo a varios pesos pesados como Xander Schauffele (PAR), Rickie Fowler (PAR), Gary Woodland (+1), Justin Rose (+1), Phil Mickelson (+1) o Francesco Molinari (+2). Desde este sábado, completada la rotación de campos, se jugarán dos rondas en el campo sur que determinarán quién es el ganador del Farmers 2020, primera gran cita del PGA Tour en el nuevo año.

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