Jon Rahm (-11) ha jugado con el temple de los veteranos la segunda jornada del Quicken Loans National y se mantiene en lo más alto de la clasificación, esta vez empatado con Billy Hurley III, compañero de partido del joven vasco que ha necesitado firmar la mejor tarjeta del día en el Congressional (65) para alcanzarlo. De hecho ambos tienen ya una ventaja de tres golpes sobre su inmediato perseguidor, el eterno Vijay Singh (-8).
Puede que haya que seguir frotándose los ojos, pero de momento el Expreso de Barrika mantiene a raya a toda una nómina de ilustres: Els (-7), Haas (-7), Fowler (-6), Reed (-4)… Y, cuando quizá cuadraba más andar haciendo cuentas por ver si el español era capaz de pasar un corte que se ha quedado en el PAR, resulta que en realidad asistíamos hasta el mismo 18 a su lucha por mantenerse como líder en solitario.
No pudo conseguirlo tras hacer sus dos primeros bogeys de la semana en los hoyos 10 y 18, pero lo cierto es que su juego anduvo casi a la misma altura que el jueves. Muy fiable desde el tee y creándose múltiples y variadas opciones de birdie a lo largo y ancho del Blue course del Congressional. Puestos a exigir a un mozo al que no se le puede exigir nada, digamos que sólo le faltó embocar algún putt más de media distancia para haberse ido a los registros de la primera vuelta… Golf ficción, qué duda cabe.
Sus primeros nueve hoyos han sido arrebatadores, bestiales, firmando los dos primeros birdies de la vuelta sin sufrir lo más mínimo, puesto que los dejaba casi dados en los hoyos 3 y 4. Acto seguido, exprimía los dos pares 5 de la primera mitad del campo, embocando sendos putts que no llegaban al metro y medio de distancia. Una secuencia sacada del manual de los campeones para pasar por el meridiano de la ronda con un parcial de cuatro menos…
Puestos a sorprendernos y sin faltar un ápice a la verdad, digamos incluso que su primer bogey del torneo, que caía en el hoyo 10, par 3, llegaba después de pegar un tiro poderoso que volaba cuadrando la línea a la bandera y que se marchaba ligeramente por detrás, seguramente por un exceso de adrenalina.
El escenario y las circunstancias se le van a ir complicando, por supuesto. El reto es apasionante y sea como sea ya resulta una auténtica hazaña que Jon Rahm salga el sábado en el partido estelar de un torneo del PGA Tour en el que debutaba como profesional. Si consigue seguir disfrutando en el campo junto a Ben Shur, su caddie y amigo, tal y como se le ha visto hacerlo durante los primeros 36 hoyos, entonces se lo va a poner muy cuesta arriba a todos lo ‘bichos’ que vienen por detrás.
Siendo un dato curioso y de cierto peso, lo de menos, sinceramente, es si Jon ha firmado un mejor comienzo que Seve, Chema o Sergio en su primer torneo como profesional. La enjundia del asunto se ventila de verdad a partir de ahora, porque Rahm sí se ha postulado ya como candidato al triunfo después de dos vueltas de altos vuelos. Palabras mayores. Y, tampoco lo olvidemos, también podría sacarse el pasaporte al British Open en Troon si finaliza dentro del top-12 y entre los cuatro primeros que no tengan ya el billete para el tercer Grande de la temporada. Sería la locura. Pinche aquí para consultar los resultados.
