Las tres últimas participaciones de Henrik Stenson en el Wyndham Championship no habían salido bien. En dos ocasiones falló el corte y en la tercera tuvo que retirarse antes de salir a jugar víctima de una gripe. Con estos antecedentes, se pueden imaginar, el sueco no estaba precisamente loco de contento con la idea de volver a jugar el torneo de Greensboro este año.
Sin embargo, no había elección. Tenía que jugar sí o sí para cumplir el mínimo de 15 pruebas por temporada que obliga el circuito americano para mantener la membresía. Empujado por las circunstancias, Stenson simplemente aplicó el teorema popular: “si hay que ir se va, pero ir por ir es tontería”. Y ganó el torneo. Llegados a este punto conviene aclarar que no tenemos la confirmación oficial de si el golfista nórdico ha visto en alguna ocasión el programa de José Mota.
Y Stenson ha ganado al modo Stenson. Con rotaciones. Dejó en el cuarto de palos el driver y se dedicó durante toda la semana a pegar mandobles a diestro y siniestro con sus maderas 3 y 4. Un rápido vistazo a los bíceps y espalda del bueno de Henrik es suficiente para saber que no le hace falta usar el driver para hacer metros. Es de los pocos jugadores en el mundo que se puede permitir semejante lujo.
La victoria de Stenson se fraguó en el tramo final de la vuelta, en el momento de la verdad. Acabó con tres birdies consecutivos en los hoyos 15, 16 y 17 y se impuso un golpe de ventaja sobre el joven Ollie Schniederjans. “Siempre es un placer ganar un torneo por delante de un joven de veintitantos años”, aseguró con una amplia e irónica sonrisa en la boca, para añadir “y a uno de 36 o 46”. Stenson tiene 41 años y ha logrado la sexta victoria de su carrera en el PGA Tour. Oficialmente, ya es el jugador sueco que más veces ha ganado en Estados Unidos, por delante de Jesper Parnevik y Carl Pettersson, que se quedaron en cinco triunfos. Así, ya no sólo es el mejor jugador sueco de la historia, que ya lo era, sino también el que más triunfos atesora al otro lado del Atlántico.
Otra consecuencia directa de su triunfo, el primero desde el Open Championship del año pasado en Royal Troon, es que Stenson se mete de lleno en la pelea por ganar la FedEx Cup, algo que ya sabe cómo se hace. Ha pasado del puesto 75º de la FedEx al 23º. Veremos si mantiene la táctica durante los Playoffs y juega sin driver o vuelve a hacer rotaciones. Por lo pronto, esta semana llevaba cuatro wedges en la bolsa, algo que hizo por primera vez en el Bridgestone y que ha vuelto a llevar a cabo en Greensboro. Tácticas.
