El desafío comienza a las 19,30.
Miguel Ángel Jiménez colocará su bola en el tee del 1 ante la mirada del excéntrico Rory Sabbatini. Tendrá 18 hoyos por delante y un solo objetivo: romper una barrera que sólo ha logrado Tiger Woods…
Decir esto ya es suficiente para comprender la dificultad de la empresa. El californiano es el único que conseguido ganar el WGC-Bridgestone Invitational viniendo desde atrás en la última ronda. Y no lo ha hecho una sola vez, sino tres. Ahí va eso…
Jiménez tiene un punto de dificultad aún mayor. Está más lejos (cuatro golpes) de lo que nunca estuvo Tiger. Además, tiene por delante un puñado de muy buenos jugadores: Mickelson, Westwood, Goosen, Singh, Appleby…
Fíjense si es complicado el asunto que Mickelson lo tiene muy claro. El norteamericano sólo otorga opciones de victoria a Westwood, Singh, Appleby y él mismo. Está convencido de que algunos de ellos hará hoy una gran vuelta, se moverá en sesentas y eso hará imposible la caza a cualquiera de los que viene por detrás.
Pero Jiménez de mueve bien cuando llega desde atrás…
Quizá no tan lejos, pero si tiene un arranque como el de ayer y los de cabeza se preocupan sólo de marcarse entre ellos, puede dar un buen susto.
Es posible que Mickelson supiera estos datos de Tiger cuando se aventuró a reducir a cuatro el número de candidatos al triunfo final en Firestone. También es posible que el número 2 del mundo conozca también estos otros datos: de las 27 veces que ha salido el cuarto día como líder de un torneo ha ganado 20. Sobresaliente. Su efectividad como líder contrasta con la de Vijay Singh. El fidjiano ha salido líder el último día en el PGA Tour en 30 ocasiones y ha vencido en 17.
Eso sí, Vijay tiene un dato que juega a su favor: lleva seis años ganando al menos un torneo en el PGA Tour. Aún no lo ha conseguido en 2008…
¿Y Westwood? Pues busca su primera victoria en el circuito americano. Y, además, es el que mejor está jugando…
Hagan sus apuestas.
