Hoy arranca el Wyndham Championship, último torneo del calendario regular del PGA Tour y, por lo tanto, como cada año, última oportunidad para meterse en los play offs de la Fedex Cup, que arrancan la semana que viene. En esta edición, con una novedad: hasta hoy algunos llegaban al Wyndham con el objetivo de meterse entre los 125 primeros, pero hoy el asunto es todavía más exigente: hay que entrar entre los setenta mejores del ranking para acceder al primer play off.
Es un torneo de segunda fila, qué duda cabe, si lo comparamos con otras grandes citas del año en el circuito estadounidense, pero el hecho de ser la última llamada al tren de los elegidos lo dota de un tirón y un carisma innegables. Cada año, además, no faltan los nombres de algunos ilustres que llegan hasta el Sedgefield Country Club (Greensboro, Carolina del Norte) caminando por el alambre. Justin Thomas es el caso más sonado en la presente edición. El de Kentucky, que no jugaba el Wyndham desde 2016, llega a la cita en el puesto 79º de la Fedex y necesita como mínimo acabar en decimoctava posición, aunque sólo de acuerdo a la aritmética más básica: los precedentes históricos vienen a mostrarle que en realidad tendrá que terminar dentro del top ten, e incluso del top 5 del torneo, para de verdad asegurar su presencia en el primer play off de la Fedex Cup, donde ahora mismo sólo 56 jugadores tienen absoluta y matemáticamente confirmada su presencia.
También anda en juego una racha monumental, la de Adam Scott, único jugador junto a Matt Kuchar que se ha metido cada año en los play offs desde 2007, año en el que comenzaron. Kuchar ya hizo los deberes este año y aseguró su presencia. El australiano, por el contrario, llega en el puesto 81º de la Fedex, en una posición muy similar a Thomas y por tanto con la necesidad de apuntar de entrada al top ten del torneo.
Hay otros grandes nombres en la picota. Shane Lowry, por ejemplo, llega a la cita como número 76 de la Fedex y pendiente de su clasificación para el equipo europeo de la Ryder. El irlandés parece uno de los fijos en las elecciones de Luke Donald, pero no estaría de más que apuntalase su estatus. Y Billy Horschel (número 116 del ranking) necesita sencillamente ganar para ampliar esa notable racha de diez temporadas consecutivas alcanzando los play offs.
Además, hay otra lucha en juego, quizá menos estresante (o no, según se vea). El Wyndham marca también el final del Comcast Business Tour, que premia con un suculento bonus a los diez mejores del ranking antes de llegar a los play offs (Jon Rahm, como primero de la lista, ya tiene asegurado un bonus de cuatro millones de dólares). Pues bien, en esta batalla andan metidos hasta seis jugadores esta semana, que con una victoria podrían alcanzar el número 9 (1,25 millones de bonus) o el 10 (un millón de bonus) de esta lista. Se trata de Si Woo Kim, Sam Burns, Adam Schenk, Denny McCarthy, Chris Kirk y Taylor Moore.
