Xander Schauffele (-14) ha propinado el golpe de la semana, de momento, a la CJ Cup. Vuelta de 64 golpes este viernes en Shadow Creek y liderato con mayúsculas. Resultado imponente. No es el campo de Las Vegas un trazado para pavonearse de esta manera después de dos rondas. Hay que jugar muy bien, como ha hecho Schauffele, y también hay que meterlas desde todas las esquinas y de todos los colores, como ha hecho Schauffele. Día de máxima inspiración.
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A tres golpes del líder se ha colocado Tyrrell Hatton (-11). El inglés ha hecho hoy 68 golpes, demostrando una capacidad extraordinaria para recuperarse de los problemas. A cada bogey ha respondido con un birdie e incluso cuando ha hecho dos bogeys seguidos ha firmado después dos birdies también consecutivos. De hecho, así ha terminado su vuelta: bogey-bogey en el 15 y 16 y birdie-birdie en el 17 y 18. No hay estadística que mida más y mejor la capacidad competitiva de un individuo que su respuesta a un mal momento.
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Schauffele y Hatton son dos gallos en el corral de Shadow Creek. Con el permiso de Bryson DeChambeau, son dos de los jugadores más en forma del mundo en estos momentos. Sus cifras en el último año quitan el hipo. Desde el Tour Championship de 2019, Schauffele ha jugado 22 torneos y sólo ha quedado por debajo del top 25 en tres ocasiones, con un balance de una victoria, tres segundos puestos y diez top 10. Tiene en vigor una racha de nueve top 25 seguidos… y algo muy raro tendría que ocurrir en los 36 hoyos restantes para que no sean diez. Hatton, por su parte, ha disputado 18 torneos desde el BMW PGA Championship del año pasado y su hoja de servicios es: tres victorias (una en el PGA Tour), ocho top ten y sólo cuatro puestos más allá del top 25. Pesos pesados en el ring de Las Vegas. Son de lo mejorcito que hay en el mundo, dos top 10 mundiales. Jugadores más que consagrados en los últimos años.
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A estas alturas no vamos a descubrir a Schauffele y Hatton, dos golfistas por cierto de estilos parecidos. Son muy sólidos desde el tee y se comen las banderas. De profesión, sus hierrazos. Buscando siempre el trapo y con un instinto agresivo especialmente afilado. No parecen temer a nada ni nadie y se suelen crecer en escenarios hostiles. Promete el fin de semana.
Algo más atrás se han colocado Russell Henley (-10), Talor Gooch (-9), Collin Morikawa (-8) y Jason Kokrak (-8). Obviamente, queda todavía mucha tela que cortar y más de un jugador tendrá algo que decir este sábado en el día del movimiento, pero da la sensación ahora mismo que todo apunta a suelo entre Schauffele y Hatton. Hay otras unidades colocadas en segunda fila a las que no habrá que perder de vista, caso de Justin Thomas (-6) o Hideki Matsuyama (-6), aunque incluso ellos, a ocho impactos del líder, van a necesitar ya algo muy especial.
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En el capítulo de las decepciones hay que subrayar una semana más a Rory McIlroy (-2). El golfista irlandés ha hecho hoy 69 golpes, pero apunta a otro torneo que ni fu ni fa. Es cierto que se trata de Rory y nunca se sabe cuando puede despertar la bestia, pero la tónica desde hace ya muchas semanas es oscura. Otro que no levanta cabeza es Jordan Spieth (+4).
Respecto a los latinos, Jon Rahm y Joaquín Niemann lideran el escuadrón con -4, seguidos de Sergio García (-3) y Sebastián Muñoz (-3). Todos ellos tienen opciones de hacer aún algo interesante los dos días que restan. Más atrás se encuentran Abraham Ancer (-2) y Carlos Ortiz (-1).
