Este jueves, en el TPC Southwind de Memphis, arranca una nueva edición de los Playoffs de la FedEx Cup en el PGA Tour con la disputa del FedEx St. Jude Championship. Un torneo al que acceden los 70 jugadores mejor clasificados en el circuito durante la temporada regular y donde, además de por los puntos para seguir avanzando en el camino hacia Atlanta, está en juego un cuantioso cheque de 3,6 millones de dólares para el ganador de los 20 que reparte el evento. Eso sí, más allá de puntos y dinero, todas las miradas, otra semana más, se dirigirán hacia el Número Uno del mundo…
Scottie Scheffler, tras su brillante y emotiva victoria en los Juegos Olímpicos de París hace apenas 10 días, se presenta de nuevo como el gran favorito al triunfo. Pero lo hace con un curioso condicionante: hasta la fecha, no solo no ha ganado nunca la FedEx Cup sino que tampoco ha sido capaz de imponerse en ninguno de los eventos que conforman los Playoffs. Tal vez sea lo único que le falta en este inolvidable 2024 en el que ha logrado conquistar el Arnold Palmer, el THE PLAYERS, el Masters, el RBC Heritage, el Memorial, el Travelers… y el oro olímpico en Le Golf National.
Con 5,993 puntos, el estadounidense parte con una ventaja abismal en la clasificación de la FedEx sobre Xander Schauffele, al que saca casi 2,000 puntos (justo los que recibirá el ganador de cada uno de los dos primeros torneos de las series finales); y prácticamente duplica a Rory McIlroy, tercer clasificado. Pero intentará coronar su gran año con algún triunfo más en esta apasionante segunda quincena de agosto y sucediendo a Viktor Hovland en el palmarés de ganadores del circuito… si su juego se lo permite en East Lake donde, pese a que el formato no le convence, se jugará el trabajo del año.
Scheffler, entusiasmado tras el oro olímpico
«Me ha sorprendido la cantidad de gente que quiere ver la medalla. Creo que hay muchas cosas en el golf por las que te dan la enhorabuena, pero creo que a mucha gente le hace mucha ilusión ver la medalla, y la verdad es que es bastante guay, así que esa parte ha sido divertida. La tendré conmigo las dos próximas semanas porque no voy a volver a casa, así que se quedará conmigo», ha reconocido Scheffler este miércoles en Memphis durante su rueda de prensa oficial.
El Número Uno también ha hablado de lo que más le sorprendió de él mismo en los Juegos de París: «Supongo que mi propia reacción. Realmente no sabía lo que sería subir al podio, y sentí que la semana había sido un reto porque sentía que estaba jugando muy bien, pero no conseguía nada, y cada vez me quedaba más atrás. Me repetía a mí mismo que esperara a entrar en ‘calor’ porque sabía que una vez que empezara a hacer birdies, me daría la sensación de que llegarían uno tras otro por la forma en que estaba jugando. Teddy hizo un buen trabajo manteniéndome paciente. Sentí como si en un momento del domingo, se nos acabara el tiempo, y yo no fuera a conseguirlo. Sobre todo cuando Rahm estaba con 20 bajo par y yo a seis o siete golpes, que parece insuperable. Pero había que confiar en que él cometiera algún error y seguir jugando un gran golf. Subir al podio creo que ha sido una de las cosas más bonitas que he vivido en el golf. Fue muy divertido».
El formato de la FedEx no convence a Scottie
Aunque su comparecencia, cómo no, se ha centrado en los Playoffs, en este torneo de Memphis… y en su reto de ganar la FedEx Cup: «Realmente no pienso que sea un asterisco para mí ni nada por el estilo, pero definitivamente quiero ganar la FedExCup. Se dice que es la carrera de toda la temporada, pero al final todo se reduce a East Lake. No he ofrecido mi mejor juego en East Lake los dos últimos años. Jugué bien allí mi año de novato, pero después, en los últimos años no he tenido mi mejor nivel. Estoy contento de que hayan cambiado un poco el campo. Puede que me dé nuevas vibraciones».
Lo que sí ha querido dejar claro Scheffler es que el formato en el que se decide al campeón del circuito sigue sin convencerle: «He hablado de ello los últimos años. Creo que es una tontería. No puedes llamarlo una carrera de toda la temporada y que se reduzca a un torneo. Hipotéticamente, ¿llegamos a East Lake y mi cuello se inflama y no se cura como lo hizo en THE PLAYERS y termino 30º en la FedExCup porque tuve que retirarme del último torneo? ¿Es esa realmente la carrera de toda la temporada? No. Es lo que es».
«Es un torneo divertido. Realmente no lo considero la carrera de toda la temporada como creo que se llama. Pero hay que encontrar la manera de lograr un equilibrio entre que sea un buen producto televisivo y que siga siendo una competición de temporada. Ahora mismo, no sé exactamente cómo están los índices de audiencia ni nada por el estilo, pero sé a ciencia cierta que no se puede considerar una carrera de temporada cuando se reduce a un torneo stroke play en el mismo campo de golf cada año», ha profundizado Scottie en su rueda de prensa.
En cualquier caso, espera tener la oportunidad de ganar y prefiere no comparar sus victorias entre sí: «A veces me resulta difícil juzgar este tipo de preguntas. Después de las Olimpiadas me preguntaron muchas veces qué lugar ocupaban mis victorias, y yo dije: ‘No voy a comparar mis victorias entre sí. Cada una es especial a su manera’. Siento que es lo mismo con el TOUR Championship. ¿Es un torneo que me encantaría ganar? Sí, me encantaría ganar el TOUR Championship. Sería fantástico. También me encantaría ganar este torneo. Me encantaría ganar la semana que viene».
«Cada vez que eres capaz de ganar un torneo, es muy divertido. Aprecio esas experiencias y espero poder hacerlo más veces en el futuro. De cara a estos tres últimos eventos de la temporada, me presento a jugar los tres y quiero darme la mejor oportunidad de ganar cada uno de ellos. En estos dos próximos torneos, estaré listo para jugar y defender mi liderato en la lista de puntos con el reto de ir a East Lake y empezar con ventaja», ha finalizado.
Sin solución de continuidad, tras este FedEx St. Jude Championship, se disputará la próxima semana el BMW Championship, segundo evento de los Playoffs. Sólo tendrán acceso los 50 mejores de la clasificación general del circuito tras el torneo de esta semana. Cuatro días en los que varios nombres importantes tratarán de remontar para no quedarse fuera. Por ejemplo, Justin Rose necesita al menos un 31º puesto esta semana para meterse en ese top 50, Viktor Hovland un 27º, Min Woo Lee un 17º y Jordan Spieth también un 17º. Mucha tela que cortar en Memphis…


