Sergio García ha vivido una jornada movidita en la última ronda del Arnold Palmer Invitational de Bay Hill. Posiblemente, pueda calificarse como la ronda de golf más rara de los últimos tiempos.
La locura comenzaba en el hoyo 6. Sergio mandaba dos bolas seguidas al agua y terminaba firmando un ‘9’ en este par 5, después de haber empezado con un birdie y un bogey y haber dejado escapar dos buenas opciones de birdie en el 4 y en el 5.
Las opciones de hacer algo sonado en Bay Hill desaparecían. Aún así, hizo birdie en el hoyo 7 y trató de enderezar la vuelta. Hasta que llegó al hoyo 10. Su bola acabó en un árbol tras pegar su golpe de salida. Sergio no se lo pensó. Se encaramó al árbol, identificó su bola y pidió un palo a su caddie Greg Hearmon para golpear mientras intentaba asegurar una posición encima del árbol. Posiblemente, el golpe más estrambótico del año. Seguramente, pasará a formar parte de la galería de golpes extraños de la historia del golf.
El público en cualquier caso acogió la decisión de Sergio con entusiasmo. Desde luego, no deja de ser espectacular. Además, le salió bien. Jugó el golpe a una mano, de espaldas y la bola acabó en el centro de la calle entre los aplausos de los seguidores ávidos de show. No obstante, después pegó un golpe nuevamente extraño. Desde la calle apenas avanzó 30 metros. (PINCHA AQUÍ PARA VER EL GOLPE).
Para terminar con una jornada delirante, Sergio decidió retirarse del torneo después de jugar el hoyo 12 y nada más suspenderse la ronda por tormenta eléctrica. Marchaba cinco sobre par en el día para un total de +3. El jugador argumentó problemas físicos. “No ha sido una decisión fácil. Quería seguir y acabar la vuelta y el torneo, a pesar de que no era el mejor de los días, pero las molestias iban a más y he decidido no seguir para evitar hacerme más daño”, señaló en su web oficial.
En cuanto al golpe del árbol afirmó que “primero subí para identificar la bola y después vi que podía pegarle aunque fuera a una mano. Por suerte ha salido bien”.
