Pasó la Copa del Mundo pero el golf sigue obligado a mirar a las Antípodas esta semana. Se disputa el Emirates Open de Australia desde este jueves, una cita cargada de alicientes y con, al menos, tres razones de peso, para permanecer muy atentos.
Para empezar, este torneo supone el inicio de la carrera para el Open Championship 2014. Sí, los tres primeros clasificados, no exentos ya, para el British que se disputará en Royal Liverpool, Hoylake, saldrán este domingo del Royal Sidney Golf Club, escenario de la prueba. Recuerden, se meten los tres primeros que no estén exentos por otra categoría, siempre y cuando acaben en el top ten.
Segunda razón: Adam Scott opta a la triple corona australiana, algo que sólo ha sido capaz de lograr un jugador en toda la historia (Robert Allenby, 2005). La triple corona es Australian PGA Championship, Talisker Masters (ambos ya en el bolsillo del Número 2 del Mundo) y el Open de Australia.
Y, por último, cuenta con la presencia de Rory McIlroy, que aún trata de despedir el año 2013 con una victoria en el zurrón. Le van quedando pocas opciones, pero parece que su juego anda cada vez más engrasado.
La participación es de lujo, con toda la Armada australiana al completo: Day, Baddeley, Ogilvy, Appleby, Allenby, Chlamers, Fraser, Senden… Además, también se encuentra invitado el norteamericano Kevin Streelman.
