Primera ronda de su carrera en un Campeonato del Mundo. 67 golpes. Líder de un congestionado México Championship. De esta manera tan brillante ha escrito Jon Rahm (-4) la página inicial de su historia en los WGC. ¿Quién dijo miedo? ¿Quién dijo vértigo? El español comparte la punta del torneo con otros cinco jugadores: Mickelson, Walker, Westwood, Ross Fisher y Ryan Moore.
Rahm ha hecho cinco birdies y un solitario bogey en su estreno en el Club de Golf Chapultepec. Bien desde el tee y fino en los tiros a green. Sólido. Las estadística oficial dice que sólo cogió once greenes, pero realmente los que falló acabaron la mayoría de las veces en el collarín. Completo en todas las parcelas del juego. Poderoso. Como indica su sobrenombre en su perfil de Twitter: una maza.
Su principal virtud hoy fue meterse en muy pocos problemas. Exactamente lo que demanda este recorrido pintoresco y traicionero de México City. Es cierto que se le pueden hacer birdies, pero no lo es menos que los fallos cuestan muy caros y que los greenes se han mostrado endemoniados. Muy rápidos y difíciles de leer. Movidos a rabiar. Había que tener temple…
No deja de asombrar la extraordinaria naturalidad con la que se mueve Rahm en las grandes citas y en situaciones cargadas de presión. Hoy jugaba con Martin Kaymer y Gary Woodland, un escenario que podría impresionar al más pintado, pero en el que Jon, sin embargo, demuestra una y otra vez que se mueve como pez en el agua.
Ha sabido aprovechar las opciones de birdie que se ha ido dejando, algún putt largo por aquí, un tirazo por allá, un par cinco cazado de dos… Es una especie de rodillo que va pasando por el campo recogiendo frutos. No muchos pueden decir que fueron líderes de un Campeonato del Mundo en el día de su estreno.
Pero Rahm no es la única buena noticia que nos ha dejado la Armada en la primera ronda del México Championship. Excelente también la puesta en escena de Sergio García (-3). El golfista de Borriol está a sólo un golpe de los líderes tras entregar una tarjeta inmaculada en Chapultepec. Sólo él, Rickie Fowler y Pat Perez han conseguido librarse de los errores.
Enorme juego de García. Ha cazado quince greenes y, sobre todo, se ha mostrado muy entonado con el putter. Ha metido varios putts de entre metro y medio y cuatro metros de los que te cambian una vuelta. No es aventurado decir que si Sergio mantiene este nivel en los greenes nadie se atrevería a dudar de que estará peleando el domingo por la victoria.
Sufrieron más Rafa Cabrera Bello (+1) y Pablo Larrazábal (+2). La vuelta del canario, no obstante, es engañosa. No ha estado nada lejos de los líderes en todo el día, pero en los últimos hoyos le abandonó el putt. Se le escaparon algunas opciones muy buenas y se dejó mucho por el camino. Pese a todo, tiene margen de reacción. Al igual que Larrazábal, aunque en el caso del catalán, su ronda ha sido de pico y pala. Prácticamente, no ha podido hacer un golpe más. Ha brillado de manera escandalosa alrededor de green. Sacar una vuelta de 73 golpes con cinco calles y seis greenes en los 18 hoyos es de órdago.
En cuanto a los gallitos, gran inicio de Rory McIlroy (-3) en su regreso a la competición. Un eagle fabuloso desde los árboles en el hoyo 6 cambió su vuelta. Buen también Thomas Pieters (-3) y Rickie Fowler (-2). Dustin Johnson (-1) jugó mucho mejor de lo que indica su marcador. Una tarde horribilis en los greenes le impidió estar con los líderes.
Respecto a los batacazos sonados, que haberlos haylos, destaca sobre todo el de Henrik Stenson, que se ha tenido que retirar a mitad de vuelta con un virus estomacal, Alex Noren (+5), Danny Willett (+5), Zach Johnson (+4), Brandt Snedeker (+4) o Adam Scott (+2). En cualquier caso, la clasificación está muy apretada, con cuarenta jugadores separados únicamente por cuatro golpes. Consulta aquí los resultados en directo.
