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Otaegui pone un círculo rojo y Tiger echa pestes de la poa

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Las bolsas de Otaegui y Tiger Woods en el locker room de Chapultepec. © Rocket Yard
Las bolsas de Otaegui y Tiger Woods en el locker room de Chapultepec. © Rocket Yard

Adrián Otaegui ha saldado una cuenta pendiente este domingo con el Club de Golf Chapultepec. Al fin ha podido jugar bajo par. Ha entregado una tarjeta de 70 golpes y ha terminado en el puesto 60º.

No ha sido la semana soñada para el donostiarra. De principio a fin ha sido un torneo raro, caótico, preparado in extremis y con demasiado cabos sueltos. Sin embargo, Adrián le ha puesto un círculo rojo a este WGC México Championship justo antes de irse.

CRÓNICA | Pero sigue siendo el Rey…

El círculo rojo significa que lo quiere volver a jugar. No sólo porque sea un WGC, lo cual es una obviedad, sino porque se ha quedado con las ganas de dar alguna vuelta más a Chapultepec. Tiene la certeza de que este trazado mexicano se adapta bien a su juego y puede hacer muy buen resultado.

No sólo es una sensación, este domingo se lo ha demostrado a sí mismo con una excelente vuelta que sólo se truncó en el hoyo 6. El Pirata llegó a colocarse con cuatro bajo par después de trece hoyos, jugando sereno, seguro, por el sitio y dejándose buenas opciones. Cuando fallaba era por el lado bueno y recuperaba y cuando se ponía a tiro, enchufaba. Otaegui en estado puro. Sin embargo, un bogey en el 5 y una bola al agua en el 6 le han dejado un poso amargo al final. En cualquier caso, México le debe una nueva oportunidad a Adrián. Seguro que si el torneo empezara este próximo jueves, la historia sería muy diferente.

Sergio también sabe hacer top ten tragando sapos

– Este fin de semana se ha visto al mejor Tiger Woods de tee a green de los últimos tiempos. Y también se ha visto al peor Tiger Woods en los greenes. Ha sido su caballo de batalla. Una frustración absoluta. Ha cazado 31 de los 36 greenes el sábado y el domingo, una cifra que no tenía en un fin de semana regular del PGA Tour desde el año 2006. Al mismo tiempo, ha necesitado 66 putts, un registro que no tenía en los últimos 36 hoyos de un torneo desde el THE PLAYERS de 2002. Se dice pronto.

“Estoy muy feliz de dejar atrás la poa. Los putts buenos que tiré no quisieron entrar y los malos fueron simplemente atroces”

La conclusión es que en cuanto Tiger deje atrás los greenes de poa y se adentre en su querida bermuda de Florida, raro será que no esté peleando por el triunfo. Un día más no quiso atender a los periodistas, pero sí habló con Golf TV, con quien tiene un acuerdo comercial. “Estoy muy feliz de dejar atrás la poa. Los putts buenos que tiré no quisieron entrar y los malos fueron simplemente atroces”, explicó. Sea como fuere, la evolución de Tiger es muy positiva. Arrancó el año con un puesto 20º en el Farmers, siguió con un 15º en el Genesis Open y ahora ha sido décimo. Sin duda, es uno de los principales favoritos a la victoria en Bay Hill la próxima semana.

Sólo tres jugadores ganaron a Rafa desde el viernes

Justin Thomas ha hecho otro 62 en Chapultepec. Es decir, ha igualado el récord del campo que él mismo estableció el año pasado. Por momentos pareció que incluso lo iba a superar. Su vueltón le ha servido para acabar en el top ten viniendo de la nada.

Phil Mickelson ha arrojado esta semana un extraño dato estadístico. No ha hecho ningún birdie en los pares 5. Es la tercera vez en su carrera que le sucede. Las otras dos fueron en sendo US Open, el de 2006 en Winged Foot y en 2012 en Pinehurst.

Rahm rompe una racha… y nada más que una racha

Rory McIlroy acumula 16 vueltas en 2019 y trece han sido por debajo de 70 golpes. Su media es de 68,25. Extraordinaria. Por primera vez en su carrera encadena cuatro top 5 seguidos en el PGA Tour. Parece que la victoria está al caer, pero ya sabemos lo que le cuesta a Rory.